Costa Rica, Pura Vida (II)

Por Maletapreparada2014 @maletapreparada
Como comentaba en un post anterior, la 2º parte de nuestra estancia en Costa Rica fue en La Fortuna.
Nos trasladamos hasta allí por carretera desde Tortuguero. La verdad es que no había mucha autopista precisamente y los trayectos eran largos y un poco incómodos.
La mayor atracción de este pueblo es el volcán que emana lava casi constantemente. La gran mayoría de los alojamientos, por no decir, todo, se organizan con vistas al volcán.

Fuente: www.arenalobservatorylodge.com


La 1ª noche dormimos casi con un ojo cerrado y el otro abierto: reconozco que a mi me daba un poco (sólo un poco, je je ) de yuyu saber que estábamos durmiendo al lado del volcán más activo de Costa Rica. Además, es de los más visitados en el mundo.
Cuando llegamos a La Fortuna, nos llevaron directamente al lugar desde donde mejor podíamos ver lava saliendo del volcán. Desde su última erupción en el año 1968, no ha dejado de expulsar gases, vapor y material piroclástico. Se tienen que dar dos condiciones para poder disfrutar del "espectáculo": que no esté nublado y que Don Arenal decida, en ese momento, expulsar lava. Por eso, hay que ir con tiempo porque a veces, hay que esperar un poco.
Desgraciadamente, nuestras fotos del volcán con lava no son nada buenas, así que aquí les dejo una foto sacada de la web www.arenal.net. He elegido esta, porque es la que más se parece a lo que nosotros pudimos ver.

Después de haber visto algo de lava saliendo del volcán, y casi ya con la noche encima, nos llevaron a nuestros hoteles. Como bien sabes, este fue un viaje que nos ganamos, por lo que los hoteles no eran elección nuestra, pero, para ser sincera, este estaba muy bien. Se llama "Hotel Los Lagos Spa&Resort".
Se trata de un hotel con unas instalaciones inmensas que se extienden por una colina, como no, con vistas al volcán. Para hacernos una idea del tamaño del mismo, decir que una vez haces el check-in, un minibus te subía hasta la habitación, y estaba disponible siempre en recepción.
Nuestra habitación, bastante amplia y cómoda, se encontraba en una hilera de habitaciones de una sola calle que a mi me recordaba a la típica urbanización americana. Lo mejor, la parte de atrás, una pequeña terraza con un gran jardín compartido con el resto de habitaciones de la zona y unas preciosas vistas al volcán.
Reconozco me que considero muy fan de los desayunos en los hoteles (cosa que nuestra hija, no sé por qué, ha heredado también). Y desayunar de una manera espectacular con las maravillosas vistas del volcán, no tiene precio.

Entre las actividades que hicimos durante nuestra estancia en Arenal, se encontraba la visita a las Termas de Tabacón, un precioso resort con unos manantiales que emanan a temperaturas entre 25ºC y 50ºC. Además, como reza en su propia web  tienen una combinación de volumen, temperatura y contenido mineral única en el mundo. Esto, yo no se lo voy a discutir a nadie. De lo que sí puedo hablar es de lo relajante y maravilloso de sus manantiales, a temperaturas tan elevadas que me sorprendió que ninguno de nosotros saliera cocinado de allí ;-)


Tras una comida en el restaurante del resort, vuelta a nuestro hotel a relajarnos aún más antes de hacer un " "paseo" entra las copas de los árboles, a través de puentes colgantes.Se recorren unos 3 kilométros de bosque primario con una gran variedad de flora y fauna.

Viajar a Costa Rica es viajar a un destino de naturaleza y aventura, que merece muchísimo la pena.
¡¡Pura Vida!!