Se convirtió en la Yoko Ono de Nirvana para después pasar a ser conocida como La viuda negra.
Tras el "suicidio" de Kurt Cobain, empezó su descenso a los infiernos. Su vida eran las drogas y el alcohol. Después añadió el bótox. A golpe de bisturí se ha convertido en una rubia esperpéntica que da miedo.