Cowboys & Aliens (Jon Favreau, 2011)

Por Especialistamike
Título original:Cowboys & AliensGénero:
Duración:País:
Dirección: Jon FavreauGuión:Roberto OrciAlex KurtzmanDamon LindelofMark FergusHawk Ostby
Intérpretes:Daniel CraigHarrison FordOlivia WildeSam Rockwell
Música:Harry Gregson-Williams Web: cowboysandaliensmovie.com/
1875, territorio de Nuevo México. Un extraño con una amnesia total llega a Absolution. La única pista de su pasado es un misterioso grillete que le rodea la muñeca. Lo que descubre es que la gente del pueblo no da la bienvenida a los forasteros, y nadie hace un movimiento en sus calles a menos que la orden de hacerlo venga de la mano del coronel Dolarhydel. Pero Absolution está a punto de experimentar algo que apenas puede comprender, ya que el desolado pueblo es atacado por unas extrañas criaturas desde el cielo. Descendiendo con estrépito a una velocidad impresionante y con unas luces cegadoras para abducir uno a uno a la gente indefensa, esos misteriosos visitantes desbordan todo lo que el pueblo haya conocido hasta ahora. Ahora, ese desconocido al que rechazaron es su única esperanza para la salvación.
El hecho de que el guión de una película haya sido escrito por hasta cinco personas distintas debería ser señal de advertencia de que es muy probable que lo que veamos en pantalla no entre dentro de la definición de buen cine y se acerque peligrosamente a lo que Perse suele denominar "una mierda como una catedral". Con Cowboys & Aliens corrimos ese riesgo ante las escasas opciones de una cartelera en la que poco o nada nos quedaba por ver. He de reconocer que la experiencia no fue tan dolorosa como en un principio parecía que iba a ser y la película pasó sin pena ni gloria, sin despertar en mí un interés fuera de lo normal y agradeciendo que no me sangraran los ojos.

El film, basado en un cómic que no he tenido oportunidad de leer (y que quizás no lea, puesto que le caen palos por todas partes), es una extravagante y bizarra mezcla de dos de los grandes géneros de la historia del cine: el western y la ciencia-ficción, en una valiente conjunción que se queda en tierra de nadie, a mitad de camino entre los dos géneros, y eso es sinónimo de indiferencia para el espectador. Tenemos cowboys y tenemos aliens, pero la mezcla no termina de cuajar, tal y como ocurría en films parecidos donde el western se fusionaba con otras vertientes, como Wild Wild West (1999) o la funesta Jonah Hex (2010).Ni siquiera los intentos por convertir el film en una cinta de aventuras animan el cotarro, resultando una historia poco dinámica a pesar de que, a priori, prometía todo lo contrario dados los elementos utilizados. Con todo ello, el film convence algo más cuando se mueve en el terreno del western y no en el de los alienígenas.

Daniel Craig se marca una de esas hieráticas y frías interpretaciones a las que nos tiene acostumbrados, pero con un resultado menos impactante que en la excelente Casino Royale (2006). Su inexpresiva cara no funciona en esta ocasión y le come la tostada un Harrison Ford que, sin esforzarse demasiado, resulta más convincente que el actor nacido en Chester. Su personaje es de los pocos que experimenta una ligera evolución a lo largo de la historia, pasando del escepticismo y la suficiencia al afecto y la camaradería. El papel femenino protagonista recae en esta ocasión sobre una insulsa Olivia Wilde, con un enigmático personaje (con unos orígenes y un rumbo que servidor tenía claro a los diez minutos de la película) de supuesta cierta relevancia para la historia que nunca llega a establecerse como capital en la historia. Los secundarios cumplen, aunque dan la sensación de que podían haber dado mucho más de sí, como es el caso de Sam Rockwell y su intento de aportar algo de humor a la narración, o el siempre correcto Clancy Brown como el personaje de más elevada condición moral de la historia.
En cuanto al apartado técnico de la película, decir que se me antojan excesivos los 160 millones de dólares de presupuesto para el resultado final, que sin ser mediocre, si me parece justito en cuanto a lo que cabría esperar. Lo que sí me gustó fue el diseño anatómico y ciertos detalles de los alienígenas. La ambientación, incluyendo escenografía, vestuario y puesta en escena,  si me pareció creible, realista y totalmente conseguida, alcanzando un nivel convincente cual western clásico.

En definitiva, la película funciona mejor cuando discurre por el western puro y duro, y el guión se diluye cuando entra en juego el factor alienígena. Ahí es cuando la historia se descontrola un poco, chirrían las superposiciones entre géneros y flaquea nuestro interés. Es un film que discurre claramente de más a menos, hasta llegar a una última parte realmente pobre en cuanto a argumento y un final totalmente predecible y pueril. No es el truño que me esperaba, pero tampoco pasará a los anales de la Historia del Séptimo Arte. Para pasar el rato en una de esas tardes de domingo en las no hay nada mejor que hacer...