De los grandes estudiosos de la poesía española (y sin duda el catedrático Francisco Javier Díez de Revenga figura en esa primera línea excelente) siempre cabe esperar volúmenes que enriquezcan nuestro conocimiento. Es lo que ocurre con Creación y memoria, una colección de escritos de José García Nieto y Gerardo Diego donde los dos poetas (ambos miembros de la Real Academia Española y ganadores del premio Cervantes) se observan el uno al otro, se analizan, se comentan y se elogian. Las dos fundaciones que llevan sus nombres colaboran en este tomo, que publica el sello Anthropos y que brilla por las descomunales erudiciones, siempre sorprendentes y crecientes, del editor... Leemos en estas páginas cómo Gerardo Diego constata que “una constante floración de revistas irrumpe por todos los jardines poéticos de España” (p.3), y entre ellas destaca la célebre Garcilaso, cuyo director es José García Nieto, quien fulge por “la diplomacia, el buen gusto y el equilibrio conjugador” (p.4). De ahí que se le pueda considerar con justicia como “nieto de Garcilaso” (p.6), “dueño de una seria elegancia” (p.7) que lo convierte en un “perfecto poeta” (p.22)... Por su parte, el ovetense aplaude como “acertadísima” (p.30) la elección de Gerardo Diego como académico y considera que en el panorama de la lírica nacional hay “pocos poetas tan necesarios, tan naturales” (p.37), porque resulta evidente que “entronca rigurosamente con esa serie de escritores que dan seriedad y fortaleza a nuestras letras” (p.41). En todo momento muestra su más rendida admiración personal y literaria por “el humano, el divino, el creacionista, el clásico, el libérrimo, el sumiso, el absoluto, el terrenal, el testigo, el delirante Gerardo Diego” (p.43), a quien considera “gloria ya de nuestro siglo” (p.51), porque a su condición de poeta excelso une la de “prosista inigualable” (p.62)... Esta rica colección de escritos se completa con un cuidado epistolario (que ocupa casi treinta páginas del volumen), con unos poemas (sólo dos de Gerardo Diego, por una docena del ovetense) y con dieciséis fotografías delicadamente escogidas donde se puede ver a ambos escritores en el Café Gijón, en una recepción de Adonais o en congresos de poesía... En suma, un volumen francamente curioso e interesante, donde podemos sentirnos más cerca de estos dos magníficos poetas gracias a la labor investigadora y unificadora del profesor Francisco Javier Díez de Revenga, uno de los ensayistas más laboriosos y eficaces del panorama nacional.
De los grandes estudiosos de la poesía española (y sin duda el catedrático Francisco Javier Díez de Revenga figura en esa primera línea excelente) siempre cabe esperar volúmenes que enriquezcan nuestro conocimiento. Es lo que ocurre con Creación y memoria, una colección de escritos de José García Nieto y Gerardo Diego donde los dos poetas (ambos miembros de la Real Academia Española y ganadores del premio Cervantes) se observan el uno al otro, se analizan, se comentan y se elogian. Las dos fundaciones que llevan sus nombres colaboran en este tomo, que publica el sello Anthropos y que brilla por las descomunales erudiciones, siempre sorprendentes y crecientes, del editor... Leemos en estas páginas cómo Gerardo Diego constata que “una constante floración de revistas irrumpe por todos los jardines poéticos de España” (p.3), y entre ellas destaca la célebre Garcilaso, cuyo director es José García Nieto, quien fulge por “la diplomacia, el buen gusto y el equilibrio conjugador” (p.4). De ahí que se le pueda considerar con justicia como “nieto de Garcilaso” (p.6), “dueño de una seria elegancia” (p.7) que lo convierte en un “perfecto poeta” (p.22)... Por su parte, el ovetense aplaude como “acertadísima” (p.30) la elección de Gerardo Diego como académico y considera que en el panorama de la lírica nacional hay “pocos poetas tan necesarios, tan naturales” (p.37), porque resulta evidente que “entronca rigurosamente con esa serie de escritores que dan seriedad y fortaleza a nuestras letras” (p.41). En todo momento muestra su más rendida admiración personal y literaria por “el humano, el divino, el creacionista, el clásico, el libérrimo, el sumiso, el absoluto, el terrenal, el testigo, el delirante Gerardo Diego” (p.43), a quien considera “gloria ya de nuestro siglo” (p.51), porque a su condición de poeta excelso une la de “prosista inigualable” (p.62)... Esta rica colección de escritos se completa con un cuidado epistolario (que ocupa casi treinta páginas del volumen), con unos poemas (sólo dos de Gerardo Diego, por una docena del ovetense) y con dieciséis fotografías delicadamente escogidas donde se puede ver a ambos escritores en el Café Gijón, en una recepción de Adonais o en congresos de poesía... En suma, un volumen francamente curioso e interesante, donde podemos sentirnos más cerca de estos dos magníficos poetas gracias a la labor investigadora y unificadora del profesor Francisco Javier Díez de Revenga, uno de los ensayistas más laboriosos y eficaces del panorama nacional.