Creadores de superhéroes, penurias humanas (parte 2 y final)

Publicado el 28 septiembre 2018 por Raude44 @RAUDEENLARED

Como dije en el anterior artículo, la cosa no acababa con los creadores de Superman, por cierto, si no lo habéis leído, ya estáis clicando en este enlace: CREADORES DE SUPERHÉROES, PENURIAS HUMANAS (PARTE 1)

Si os pareció algo enrevesado lo sucedido en la vida de Siegel y Schuster, imaginaos una historia de una mente superdotada que pudo acabar desquiciado en vez de rico y que su ideología feminista le salvó para sacar adelante a su atípica familia.

Por cierto, ¿qué tiene que ver Wonder woman con la máquina de la verdad? pues mucho más de lo que te piensas, y no sólo por su cuerda...

Esta es la historia de un tipo superdotado, que vivió la vida que quiso y salió adelante gracias a la convicción y ayuda de dos mujeres totalmente diferentes y complementarias, y que juntos fueron un ícono del feminismo, resurgiendo incluso de las cenizas.

El doctor William Moulton Marston nació el 9 de mayo de 1893 en Saugus, Massachusetts. De familia pudiente y con un cerebro excepcional, muy adelantado con respecto a sus coetáneos, estudió Psicología en la Universidad de Harvard consiguiendo la licenciatura en 1915 con 18 años y una Maestría en Leyes en 1918 con 21.

Un año después de su periplo universitario se casó con Elizabeth "Sadie" Holloway, a la que había conocido en la carrera de Psicología y consiguió trabajo en la Universidad Americana de Washington D.C y la Universidad Tuffs de Medford (Massachusetts).

En 1929 la pareja se muda a California donde Marston encuentra trabajo por un año en los Estudios Universal como Director de Servicios Públicos.

Él tenía la necesidad de progresar, pero tenía miedo a hacerlo y a cada paso dado, Sadie era la que iba guiando al matrimonio tomando las decisiones que su esposo no se atrevía a dar por miedo al fracaso.

1. LA MÁQUINA DE LA VERDAD Y LA AMANTE

Gracias a estos progresos en sus estudios creó el primer detector de mentiras que se basaba en la medición de la presión sanguínea y otros síntomas corporales.

La idea, como no, provino de su mujer al pronunciar una frase que marcó la trayectoria de este proyecto: "Cuando las chicas nos excitamos, se nos acelera el pulso y el corazón late más rápido". A lo que Marston replicó: "Entonces vuestras emociones... ¿activan otras cosas?"

El primer prototipo fue un aparato capaz de medir la presión sanguínea sistólica, por medio de un cilindro y dos agujas con tinta que se movían según los resultados de la presión e iban dibujando en el cilindro una línea ininterrumpida con diferentes curvas, tal como la conocemos hoy en día. Si la presión aumentaba o disminuía, el ritmo regular de la línea se rompía proporcionando picos y figuras diferentes que demostraban nerviosismo y por tanto mentiras.

Hay que retroceder un poco en el tiempo para conocer a Olive "Dotsie" Byrne. Era 1925 y Marston se encontraba dando clases en la Universidad Tuffs de Medford y esta señorita era una de sus alumnas.

Durante una clase el profesor expuso una idea: "Todas las personas somos la mayoría del tiempo normales, pero guardamos nuestros oscuros deseos en alguna parte. La gente divide sus emociones en cuatro apartados: dominación, influencia, sumisión y conformidad"

Estas palabras atrajeron de forma sorprendente a Olive que quiso enseñarle a su profesor más sobre esa clasificación de las emociones con ejemplos reales dentro de la propia Universidad en la hermandad de chicas: pruebas de sumisión de iniciación donde las novatas eran consideradas como niñas pequeñas (incluso algunas dentro de la hermandad vestían como bebés), mientras las que llevaban más años les daban ordenes como si fueran sus madres o maestras implacables en la escuela, o hacías lo que decían o recibías azotes y pequeños castigos.

William se sintió apasionado por el nuevo mundo que le había descubierto Olive y se aprovechó de sus cualidades y formación para contratarla como asistenta personal en su proyecto del detector de mentiras, aun sabiendas de su espontaneidad y sus dotes seductoras.Y donde hay humo, terminó habiendo fuego, quedando completamente enamorados uno del otro.

Si bien Olive le enseñó ideas nuevas en temas laborales, también le aportó cosas nuevas en la cama como el campo del sadomasoquismo que siempre le había llamado la atención, pero no podía pedir a su mujer al ser ésta una relación mucho más tradicional.

Sadie era consciente de esta relación y consentía por el profundo amor a su marido y a sabiendas que, si se descubría la infidelidad, su marido sería despedido y difícilmente podría llegar a trabajar de nuevo en los puestos acordes a sus capacidades al ser un tipo mal visto por la sociedad.

En 1928, Marston publicó su libro "Las emociones de la gente normal", que fue un gran avance en para la Psicología de la Personalidad, en él se hablaba sobre la clasificación de las cuatro emociones y sobre sus avances en la máquina de la verdad y figuraba como ayudante de las investigaciones a Olive. El libro también está basado en múltiples estímulos sadomasoquistas y anotar las reacciones de las personas que participaban en ellas, pero claro, eso nadie lo sabía.

Es curioso que un hombre que era conocido en el mundo por perseguir la verdad, vivía ocultando su privacidad con constantes mentiras.

2. LA CREACIÓN DE WONDER WOMAN

William y Sadie eran fieles seguidores y potenciadores del feminismo, siempre lucharon por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres empezando porque ellas pudieran tener derecho al voto.

Con Olive aprendió que las mujeres eran seres libres en el amor y que se divertían más en la cama si ellas tenían rienda suelta. Llegó a decir que, si el hombre dejará el poder a la mujer, éste se convertiría en una persona mucho más feliz y menos autodestructiva.

Así que Wonder woman es un compendio de la idiosincrasia de sus dos mujeres: feminista y poderosa. De Sadie se incorporó el lazo de la verdad, pues por ella inventó la máquina y de Olive los brazaletes que siempre llevaba como elementos decorativos y era parte de su forma de vestir.


Marston seguía hablando sobre el hecho que la mujer no solo debiera ser libre emocionalmente, también serían estupendas líderes en el ámbito social y político porque son más aptas que los hombres para mandar y liberar el mundo.

A finales de los años 30, Marston tocaba fondo porque en el pueblo muchos sabían de su farsa y fue denigrado como profesor de Universidad y el dinero que surgía haciendo pruebas con la máquina de la verdad era cada vez menor. Con dos mujeres y cuatro retoños, había que reinventarse para salir adelante.

Lo intentó de varias maneras como escribir una novela titulada "La vida privada de Julio Cesar", aceptó varios trabajos como productor de cine y salió en un anuncio de cuchillas de afeitar con su máquina de la verdad, pero no encontraba nunca un salario fijo.

Superman dio paso a nuevos superhéroes tanto en Dc como en Marvel y los comics eran un filón para todos los niños, no iba a ser menos para los de su propia familia. William se sintió abducido por el silencio que producía en la casa y la concentración que tenían los niños en los momentos que leían esos comics y empezó a estudiarlos.

Olive y William inventaron una entrevista ficticia a este último donde ella se hacia pasar por periodista y le preguntaba al reputado psicólogo su opinión sobre los comics enviándola a Dc con ánimo de ser publicada o llamar la atención, en ella Marston decía que los comics son buenos, que Superman era fantástico pero que había mucha violencia implícita y que la mujer siempre era la persona a salvar y nunca la salvadora,

Fue Sadie una vez más quien instó a William a crear una "Superwoman" cosa que les pareció genial.

Wonder woman, pese a su éxito en años sucesivos, era venerada y criticada en partes iguales... Los niños y niñas adoraban a la heroína mientras los mayores buscaban que aportara cierta moralidad de otros comics.

Como respuesta Marston usaba su comic para afrontar ese machismo retrógrado incluyendo en sus páginas centrales una sección llamada "Mujeres maravilla del país", hablando de reconocidas heroínas de carne y hueso a contar sus experiencias a lo largo de la historia.

Al acabar la Segunda Guerra Mundial, los hombres recuperaron sus empleos y relegaron a las mujeres de nuevo a la casa. En esta época y pese a que Marston no dejó en ningún momento de empoderar a la mujer, fue vencido por un enemigo al que no pudo ganar: el cáncer.


En 1968, perdió su disfraz y sus poderes y se convirtió en una tienda de ropa, escribía una tira de amor para un periódico y terminó siendo una simple y humana espía.

4.WONDER WOMAN VUELVE A SUS ORÍGENES Y SE CONVIERTE EN FIGURA DEL FEMINISMO

A principios de los 70 el movimiento feminista empezó a crecer de manera exponencial, echándose a la calle para protestar por la igualdad de derechos.

Los comics de Wonder woman en esa época eran con diferencia los menos vendidos de Dc y parte del movimiento feminista reivindicó a la empresa de comics una vuelta los orígenes de la heroína.

Dc aprovechó la jugada y recuperó a la Wonder woman original con sus superpoderes, intentando con ello que diera sus frutos económicos al parecer apoyar a ese tipo de mujeres. Viendo el resurgir del personaje incluso crearon una serie de tv (1975-1979) con Lynda Carter como protagonista, siendo todo un exitazo, relanzando de nuevo al personaje y poniendo a la altura de Superman o Batman.

Mientras los años pasan, el mundo tarda mucho en evolucionar... De hecho, hasta el 2017, después de tropecientas películas de superhéroes tanto de Marvel como Dc, ninguna había dado el paso de hacer una con una heroína como única protagonista.

Eligieron a Gal Gadot como protagonista y la película se convirtió en un rotundo éxito, siendo hasta la fecha la mejor valorada y más vista del Universo Dc, después de haberlo intentado con Superman, con Batman y con la Liga de la Justicia, lo más curioso es que a todos les pateó el culo Wonder woman, a la espera de su segunda parte.

Y de nuevo, como ocurrió en el inicio de los comics con "La liga de la justicia", el peso de la historia recala sobre Batman o Superman, quedando esta en segundo plano

Supongo que el fantasma de Marston aún está esperando ver a una mujer en la Casa Blanca, pero eligieron a Trump y ni siquiera en la película de ella salía en los créditos Sadie y Olive, pese a ayudarle en los guiones, en la creación y en sus peores momentos.