Pero ahora gracias a un grupo de investigadores de la Universidad de Southampton, conocemos una nueva e interesante forma de almacenamiento, que consiste en nanoestructuras de cinco dimensiones dentro de un cristal de cuarzo, trayendo así la posibilidad de tener casi de forma eterna, una cantidad brutal de información de forma segura en un pequeño disco. Una tecnología capaz de sobrevivir a 1.000ºC de temperatura, virtualmente inmortal y capaz de abarcar Terabytes de información fácilmente. ¿En qué consiste semejante tecnología?
Memoria 5D, apodada "superman"
¿Cómo funciona?
La técnica de grabación se basa en pequeños pulsos láser de muy corta duración, estamos hablando de femtosegundos, que generan una estructura de tres capas de puntos nanoestructurados separados por tan sólo 5 micras, equivalente a la millonésima parte de un metro, lo que permite grabar hasta 360 TB de información en un pequeño cristal de cuarzo de cinco dimensiones a nivel nanoscópico.
Pequeños discos de cuarzo para almacenar hasta 360 TB por millones de años. Sí ¡360 TB!
Esta técnica no es algo nuevo, en 2013 se empezaron las primeras pruebas de almacenamiento sobre cuarzo y al día de hoy tenemos obras como la Declaración Universal de los Derechos Humanos, La Biblia y la Carta Magna, todas almacenadas en estos pequeños discos de cristal, pero el logro en esta ocasión es el desarrollo y la ampliación de la estructura, que dará la posibilidad de tener una gran capacidad de almacenamiento.
Parece bastante más probable que la memoria 5D solo la utilicen grandes entidades¿Quiere eso decir que en un futuro próximo podremos disfrutar de memoria 5D en casa?
Es bastante improbable. Al menos en su grabación.Esto se debe al coste y tecnología que requiere un láser ultra-rápido. Es algo solo permisible para un laboratorio. Por otro lado, un microscopio y un polarizador son más asequibles. Y aún así, difíciles de trabajar con ellos. Pero podrían darse en el ámbito doméstico. Igualmente, parece bastante más probable que la memoria 5D solo será utilizada por grandes entidades con el fin de preservar para siempre la información. Tarea que ya de por sí no es nada sencilla, prácticamente imposible, y que resulta digna de elogio.