Cada pieza o utensilio que utilizamos nos cuenta una historia, quien lo utilizó y como llegó a nosotros, pueden ser heredados de la familia ó lo que podemos conseguir en los mercados de pulgas o en subastas.
La idea es utilizar vajilla diferente, hacer único cada lugar donde se van a sentar los comensales y sobre todo divertirse, no pensar demasiado y hacer lo que sentimos.