Mucho ha llovido, y de verdad, desde que publicara el último artículo, Retrasos y avances, comentando los proyectos que abordaría a corto y medio plazo. Y de igual manera, en todo este lapso de tiempo, mucho ha cambiado mi vida y la forma de afrontarla. Al igual que, lógicamente, han cambiado mis proyectos.
Como en mi etapa en Madrid, he aprendido aquí, en Almería, alguna clase de cosas que sólo aprendes cuando las afrontas solo. Ese tipo de lecciones que aprendes a base de experiencias, bien sean malas o buenas, y que consiguen cambiar tu forma de interpretar las cosas, que te hacen mejor.
Puede que sea tarde, lo más probable es que así sea, para cambiar algunas cosas que he hecho mal a lo largo de estos últimos años y si tengo algo claro es que de nada sirve ya arrepentirse. Sin duda, de eso es algo que también se aprende, de los errores.
Y ahora, una vez asimilado todo, una vez que he recapacitado, que he llegado a comprender; sólo puedo seguir adelante, procurando no caer en los mismo errores, llevando a la práctica todo aquello que he aprendido en esta nueva etapa.
Ha habido cambios en mi vida, no sólo en mi o para mi sino para las personas que me rodean también. Sé que no es fácil para nadie, para mi tampoco, pero para aprender hay que vivir y sólo viviendo, se aprende. Por ello, siempre he pensado que de todo, más de lo malo que de lo bueno, se aprende.
Quiero aprovechar estas líneas para dar las gracias a todos los que me están apoyando, en especial a mi familia, a mi pareja y a sus padres, y que siguen ahí a pesar de todo. Para mi, ese apoyo, no sólo en lo profesional sino en lo personal, es muy importante y me anima para afrontar el día a día con ganas y fuerza.
Como ya he dicho, para mi también ha resultado difícil este cambio, pero no estéis tristes por mi, sino todo lo contrario, porque yo estoy bien y feliz por estar consiguiendo una de mis metas.
También quiero dar las gracias a todos mis amigos en Almería, en especial a Consoli y Rafa, y a su familia, y al último fichaje en mi círculo de amistades y que ya se ha convertido en un gran amigo para mi, Victor. Sin vosotros aquí, estaría aun más perdido. Gracias, de verdad.
Aun me queda un largo camino por recorrer, muchas cosas por vivir y mucho que aprender. Y espero que todos, me acompañéis siempre.
Ahora parece que se atisba un rayo de luz entre tantas nubes. La paciencia y la perseverancia durante todo este tiempo parece que comienzan a dar frutos. Además, estoy comenzando nuevos proyectos y reanudando algunos viejos.
Espero poder daros pronto noticias nuevas sobre los proyectos que tengo abiertos. De momento, sólo avanzaré que "La oscuridad en la luz" volverá a este blog en primicia dentro de muy poco con una nueva temporada.
Sin más que decir, hasta la próxima publicación.
Caminemos juntos por esta vereda,
que bien es llamada vida.