Una crema con sabor y colorido. Preparamos una riquísima crema de tomate para estos días que ya estamos rozando el final de año, ... una receta con carácter, ...para ello la servimos con un huevo, que lo cocinamos poché y que nos alegrará el ojillo cuando llegue el momento de meter la cuchara, romperlo y ver como se desparrama esa yema deliciosa que montada en la cuchara se irá dirigiendo a nuestra boca. Apetitosa, muy sana y que nos permite un respiro antes de enfrentarnos a la gran traca gastronómica de la noche de San Silvestre.
Anima mucho preparar esta cazuela, porque además de que está sabrosísima se trabaja con un color rojo tan intenso que es una alegría y luego cuando ya estamos emplatando nos queda el plato precioso, con ese color tan intenso que más parece un plato de los de buen tiempo, pero luego cuando lo probamos calentito nos deja el cuerpo preparado para cargar con el abrigo, la bufanda, el paraguas y lo que se tercie.
Unos tomates tienen la culpa de tanto regocijo, así que a por ellos y luego como siempre, nos colocamos el delantal y empezamos.
Para el caldo:
Si es de pollo: 1,5 l de agua y 1 esqueleto de pollo.
Si es de verdura: 1,5 l de agua, 1 puerro, 1 zanahoria y 1 cebolla.
Para la sopa: 1kg de tomate pera, 3 cebollas blancas, 200 g de calabaza, 1 zanahoria, 50 gr de Aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta molida (opcional) y 1/2 cucharita de azúcar.
Para el huevo poché: 1 huevo.
ELABORACION
En una cazuela echamos el agua y los ingredientes. En el caso de caldo de pollo el esqueleto y en el caso del caldo de verdura el puerro, la zanahoria, la cebolla y ponemos a calentar.
Cuando rompa a hervir bajamos la temperatura y dejamos cocer durante 30 minutos.
Retiramos, colamos y reservamos.
En los caldo lo que debemos de buscar es el sabor, por tanto cuando los estamos preparando es el momento de echar un vistazo en nuestra cesta de verduras y aprovechar todas las que se están quedando un poco "feas" para limpiarlas y utilizarlas. También se pueden preparar caldos con pastillas instantáneas y en estos casos se tendrá que seguir las instrucciones del fabricante. Observaréis que no se sazonan, en esto también depende de cada "cocinillas", en mi caso lo preparo así porque luego cuando acompañen a los guisos, sopas, cremas .... será elaborando esas recetas cuando sazonaremos.
Preparamos la verdura
Lavamos bien toda la verdura y troceamos. Reservamos.
Calentamos la sartén a fuego alto, echamos el aceite de oliva y bajamos a fuego medio.
Incorporamos la cebolla troceada para que se vaya pochando poco a poco.
Cuando empiece a verse transparente, incorporamos el tomate, la zanahoria y la calabaza.
Bajamos a temperatura baja y dejamos unos 15/20 minutos que se vaya haciendo.
Rehogamos continuamente, salpimentamos y añadimos un toque de azúcar.
Seguimos a temperatura baja unos 30 minutos más, removiendo continuamente para evitar que se pegue.
Retiramos del fuego y trituramos la verdura con una batidora, turmix o la thermomix.
Colamos por el chino para que nos quede una crema muy suave añadiendo poco a poco el caldo.
Reservamos.
Preparamos el huevo poche:
Cortamos un trozo de film transparente y lo introducimos dentro de un vasito (yo he utilizado un molde pequeño de flan), dejando las cuatro puntas por fuera.
Echamos unas gotitas de aceite y repasamos con la brocha bien todas las paredes del film para que luego, cuando esté hecho, nos salga el huevo fácilmente.
Echamos el huevo, un toque de sal y cerramos juntando las cuatro puntas.
Dejamos el aire fuera girando el paquetito y atamos con una tira del papel film o un cordoncillo.
Seguido ponemos a calentar un cazo de agua y cuando rompa a hervir, echamos el paquetito (tienen que quedar cubiertos) y contamos cinco minutos de reloj. Tenemos que mantener la temperatura.
Sacamos el huevo, cortamos el nudo con una tijera y nos ayudamos de una cucharilla para sacar el film del huevo. Reservamos.
Montamos el plato
En el plato o cuenco servimos la ración y en el medio incorporamos nuestro huevo poché.
Un toque de pimienta y empezamos a comer.
Aproveche.