-3 yemas de huevo
-1/2 litro de leche
-120g. de azúcar
-60g. de maizena
-la corteza de un limón
-una rama de vainilla o de canela
PREPARACION
Con estos ingredientes sale una buena cantidad de crema, y por lo que he leído no es recomendable su congelación así que hay que buscarle uso. Primero ponemos a hervir la leche menos medio vaso con el palo, (en este caso de canela pero me hubiese gustado más que fuese de vainilla) y la corteza de limón.
Mientras se calienta, en un bol ponemos las yemas y el azúcar y lo batimos muy bien.
Por otra parte, en el medio vaso de leche que nos habíamos guardado ponemos la maizena y lo movemos bien hasta que no quede ni un grumo. Cuando la leche esté caliente pero sin que llegue a hervir echamos la leche con maizena y movemos todo el rato con la cuchara de madera.
Bajamos el fuego, retiramos el palo y la corteza y cuando empiece a espesar añadimos el batido de las yemas y seguimos moviendo hasta conseguir una crema densa moviendo sin parar, unos cinco minutos.
Dejar templar y guardarla en la nevera. Y ahora os toca esperar para ver la delicia que preparé con ella. Se siente.