Me sangra encender la televisión y enontrarme a gente como Rosario Flores diciendo que a los músicos les están robando el pan, cuando lo que realmente sucede es que no se puede vivir siempre del pasado. Gente acostumbrada a grabar grandes éxitos y venderlos a 20 euros convirtiéndolos en disco de platino no puede concebir que, ahora que las cosas están mal, el público prefiera descargárselo. Y no va sólo por Rosario, si no por la mayoría de músicos que participaron en esta vergonzosa manifestación, incluídos los olvidadísimos triounfitos, los mismos que abordaron el mercado con su karaoke televisado. Y sí, los meto a todos en el mismo saco, que estoy muy enfadado! ;)
Rosario y compañía, ¿sabeis a quién afecta la crisis?. Afecta a ese músico que se recorre media España pagándose de su bolsillo el billete de tren, dejando en su ciudad a los músicos porque no se puede permitir el lujo de pagarles, para tocar en una pequeña sala ante poca gente y después volver a casa habiendo perdido dinero. La crisis afecta a quien no gana suficiente dinero de la música como para vivir de ella y tampoco puede tener un trabajo porque no tendría tiempo para tocar, lo que les hace vivir haciendo malabares. La crisis afecta a quien tiene que poner dinero de su bolsillo para grabar un disco, y al que observa con impotencia cómo resulta imposible que los grandes medios se hagan eco de su música...
Los que os habeis acostumbrado a dormir en hoteles de lujo, grabar en Miami y exigir Moete Chandon en los camerinos, tendreis que adaptaros a los buenos tiempos, que la mortadela no está tan mala. Mientras os fue bien no abristeis esa boca que ahora no podeis tener cerrada, pero hasta que no os deis cuenta de que, como ya avisaba Dylan, los tiempos están cambiando y actueis en conscuencia, mal futuro os espera. Porque bastante indignante es que cada vez que compre un cd virgen, un reproductor de música o un pendrive tenga que aportar, aunque sea una milésima de céntimo, a una nueva versión de Mi gato como para que encima te quejes...
Y contra la crisis, los músicos, los de verdad, ¿qué hacen?. Muy simple, canciones. Porque puede que no llenen estadios ni se puedan permitir el lujo de destrozar la suite de un hotel, pero siguen ahí, contra viento y marea, tocando allí donde quieran escucharlos, y grabando discos desapercibidos para la famosa industria o mercado, pero inolvidables para muchos de nosotros.
Hay tres artistas a los que admiro con devoción y son el ejemplo perfecto de esos luchadores de los que estaba hablando, triunfadores, como diría uno de ellos. Son, lo sabeis, Alfredo, Manolo Y Fabián, los apellidos no son necesarios a estas alturas. Los admiro, porque a pesar de que el viento sopla en contra siguen en pie, con muchas cicatrices, sí, pero la misma ilusión que el primer día. Seguramente se lo hayan dicho muchas menos veces de las que lo merecen, pero son unos genios, artesanos de la canción que se marcaron un camino y no están dispuestos a desvíarse ni un centímetro.
Por favor, que alguien me diga que la música española está en crisis o agoniza después de escuchar canciones como estas...
"Cuando quieras apostarlo conmigo", de Alfredo González, una canción que me vuelve loco y, espero, tendrá su sitio en el próximo disco del flaco, que espero que no se haga esperar...
"Dos días de tregua", de Manolo Tarancón, uno de los temas más bonitos y evocadores que nos dejó el 2009
"Adiós, tormenta" de Fabián, otra maravilla del hombre que me robó los adjetivos...
Y cuando se juntan...
"Páginas tuyas", Fabián y Alfredo González
"Retruque", Alfredo González y Manolo Tarancón
*Gracias como siempre a David, por ser mis ojos... :)