Crítica #8: la teoría del todo (contiene spoilers)

Ha llegado el momento de hacer la crítica oportuna a la que se ha convertido ya en la película biográfica más aplaudida del 2014, con permiso de Alma salvaje, Selma y demás. La teoría del todo de James Marsh supone la biografía del físico y científico inglés Stephen Hawking durante sus años de universitario en Cambridge, a la vez que conocía a su primera esposa, Jane, y formalizaba su relación con ella entrando en la etapa de su vida en la que enferma de ELA.
En mi opinión y como muchos seguramente también pensaréis, Eddie Redmayne hace una interpretación espléndida de Hawking que con razón le han valido el Óscar, el Globo de Oro y el Bafta a mejor actor. Su personaje nos ofrece algunos momentos graciosos que le quitan cierto dramatismo a la historia pero que la hacen bien, al igual que también nos da situaciones graves por los efectos de su enfermedad que le dan más emoción a la cinta del que tiene, por lo que la cosa está bien compesada. En cuanto a Felicity Jones realiza un buen papel como Jane pero me ha faltado algo en ella para que pueda decir "¡guau!". Por esta razón, quizás, Jones no se llevó ninguno de los premios a los que estaba nominada por primera vez, como el Óscar, el Globo de Oro o el Bafta a mejor actriz.
Una cosa que me gustó mucho de la película y que no sabía, y me sorprendió gratamente fue que Jane Hawking estudió filología francesa y española (siempre te alegra saber que alguien importante estudia o sabe tu idioma). Lo que menos me gustó y que me hacía sentirme muy agobiado era cuando la pobre Jane se derrumbaba al no poder cuidar de Stephen y sus tres hijos a la vez.
La idea principal del largometraje es la de sonreírle a la vida y pase lo que pase enfrentarte a las adversidades, y eso Stephen Hawking, tanto en la realidad como en la ficción lo transmite perfectamente.
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