Witches of East End es una serie que se centra en una familia de brujas, compuesta por una madre (Joanna), una tía muy loca que se convierte en gato y no le importa ir desnuda enfrente de alguien (Wendy), una hija camarera que está comprometida con un buenorro (Freya) y otra hija bibliotecaria que es muy inteligente, curiosa y siempre está tratando de descubrir las cosas que su familia oculta (Ingrid).
En la última entrada que escribí sobre Lost Girl, os dije que esta serie me recordaba mucho a Charmed (Embrujadas), pero The Witches me recuerda muchísimo más a esta serie, puesto que se centra en un ámbito familiar, compuesto solo por mujeres, donde las hijas no saben que tenían poderes y lo descubren por su cuenta, etcétera. La diferencia, es que las hijas no sabían que tenían poderes debido a que se encuentran malditas, y suelen morir sobre la veintena y vuelven a encontrarse otra vez en el vientre de su madre cuando ésta aún se encuentra en su entierro.
La historia es un poco triste, puesto que Joanna es inmortal y está obligada a presenciar la muerte de sus hijas una y otra y otra vez. Es algo que evidentemente no es de muy buen gusto, pero a Joanna tampoco parece que le afecte mucho, o es que esa actriz no sabe exteriorizar muy bien los sentimientos. Da lo mismo, lo importante es que en esta vida, Joanna decide no hablarle a sus hijas sobre la magia por probar a ver si pueden durar más tiempo vivas. El problema viene cuando una impostora que se hace pasar por Joanna (físicamente) empieza a matar a personas inocentes para inculparla y también a intentar asesinar a las hijas de ésta. En ese momento las niñas descubren los poderes.
La impostora, resulta ser la madre del prometido de Freya. Este chico, que parecía el perfecto caballero por ser un médico guapo y listo, resulta que está destinado a ser el destructor de Freya, según las cartas del Tarot. Y por supuesto el bueno, el alma gemela de Freya, es el hermano de éste. Y otra vez, tenemos aquí el típico triangulo amoroso entre dos chicos y una chica que últimamente parece estar muy de moda.
Al final de la temporada, la impostora es descubierta y acaban con ella, por lo que hijos de Penélope recuperan sus poderes (porque también son hechiceros claro). Y cómo no, cuando los descubren, Freya se da cuenta de que su amor verdadero es el hermano bueno (Killian), y justamente este es atacado, por lo cual no pueden reencontrarse. Esta escena da muchísima rabia ya que ves como Freya, con el vestido de novia va al fin a por el amor de su vida, algo que llevaba esperando toda la temporada, y resulta que se piensa que se ha ido a Costa Rica. De todas formas, estoy muy segura de que acabarán reencontrándose de una forma u otra.
En cuanto a Ingrid, mi favorita, parece ser que va a tener un papel muy importante en la segunda temporada de esta serie, puesto que resulta ser la llave hacía el mundo de donde proviene su familia. Tenía bastantes esperanzas de que el escritor que conoció en la biblioteca y ella acabaran juntos, pero este último está totalmente obcecado en descubrir el mundo de las brujas, así que he descartado esa opción, pero de igual forma, sigo pensando que esta chica necesita una relación con un hombre que no esté obsesionado con su mundo o no sea un espíritu muerto.
Eva Bel