A los comics les gustan los superhéroes, y es donde hemos conocido cómo son, cuáles eran sus fortalezas y sus debilidades, qué hacían y cuáles eran sus aventuras. El cine lo que ha hecho ha sido trasladar todas esas historias a un medio que resulta más popular. Antboy es el hijo natural de Spiderman, personaje al que le unen muchas cosas y si tuviera que especificar más a la hora de apuntar dentro de todo lo que envvuelve a este superhéroe, apuntaría a la trilogía de Sam Raimi, especialmente a las dos primeras películas. La estructura, la forma de contarla recuerda mucho a la primera película aunque el villano tiene más que ver con el Octopus de la segunda parte. Lo primero que podemos decir de Antboy es su edad, es un niño que todavía está en el colegio. Spiderman tampoco es que fuera un adulto, era un joven que estaba saliendo de la adolescencia pero que todavía no era adulto del todo con lo que por ahí se generaban todo tipo de conflictos. Antboy o Pelle que es como se llama realmente es un marginado de su colegio, alguien que pasa completamente desapercibido, excepto por profesores que le humillan o compañeros agresivos que buscan cualquier excusa para pelearse. Su búsqueda de algo mejor, de huir de esta realidad que le hace tan infeliz y que desea cambiar se hará realidad cuando una simple hormiga le pica. Todas esas aventuras que él se imagina en la que pasa de ser la víctima al héroe se harán realidad. Consigue hacer realidad lo que cualquier niño de su edad sueña, ser alguien importante y hacer algo que merezca la pena. Como en las primeras películas de superhéroes utilizan gran parte de la trama en presentarnos al personaje y en mostrarnos su transformación. Quizás aquí haya alguna novedad porque no estamos acostumbrados a alguien tan joven con lo que sus problemas son bastante diferentes a los de otros superhéroes. Spiderman tenía que buscarse la vida y compaginar su faceta especial de salvador de Nueva York con la búsqueda de trabajo y de unos ingresos fijos. En cambio nuestro héroe no tiene esos problemas, tan sólo en sobrevivir a los matones del colegio y en conseguir la aceptación de una chica con la que tiene un temprano interés romántico. Es a mitad de la historia en cuanto aparece el malo y el héroe con la ayuda de su compañero de clase intenta que el bien acabe venciendo al mal. La historia está pensada para un público infantil, por lo que cuenta y también, y es algo importante en la duración. Por lo general este tipo de películas cuando van para adultos acaban teniendo una duración excesiva y un niño no aguantaría tanto tiempo en un cine. Dura justo el tiempo para que un niño no se aburra y el adulto que lo acompañe tampoco. Si esta película os gusta, que no veo por qué no, tranquilos, ya ha segunda parte.