Crítica: ¿Cómo sabes si…?

Publicado el 31 enero 2011 por Pablur

¿Podeis imaginar un intenso dolor de muelas? ¿Y una patada en las pelotas? Ahora pensad en “¿Cómo sabes si…?” la nueva película de James L. Brooks… Ya? Pues bien, os puedo asegurar que estas tres cosas son básicamente lo mismo. Sí, así de mala es la nueva comedia (por decir algo) del director de la maravillosa e irrepetible ”Mejor… Imposible”.

Estas cosas pasan, a veces se pierde la magia (que se lo digan a Shyamalan) y por mucho que se quiera no se puede recuperar. El director tiene carta blanca en los estudios después de haber ganado y hecho ganar multitud de Oscars y demás premios cinematográficos importantes. Es por eso que entre proyecto y proyecto se les ha debido escapar este bodriaco a sus responsables y han tirado por la borda 100 millones de dólares (que me digan en qué se los ha gastado aparte de en azucar glass para invitar a Isabel Coixet porque en exteriores desde luego no y en los actores me temo que tampoco…)

Todo en esta película es un absoluto despropósito. Empezando por un guión tedioso, sin gracia y lo peor, sin ningún sentido. No funciona tampoco como comedia romántica y después de una hora empiezas a preguntarte qué motivos tenía James L. Brooks para hacer agonizar a sus fervientes admiradores (Si no fuera por él no creo que la hubiera visto) de una manera tan cruel.

Los actores, curiosamente están muy bien los cuatro; Siempre y cuando nos fijemos en su interpretación a secas, no en lo que dicen ni en lo que hacen. A Reese Witherspoon la estoy empezando a coger cariño después de intentar salvar el tipo con semejante papel demostrando además que es muy buena actriz. Lo mismo ocurre con Paul Rudd, el único personaje que tiene alguna frase ocurrente estilo “Brooks de antaño”. Muy buen actor y muy simpático él pero la base es el guión así que no había nada que hacer. Owen Wilson repite el papel que ha hecho toda su vida y Jack Nicholson por otro lado está totalmente desaprovechado pero, como siempre, hace suyas todas las escenas en las que aparece.

Hans Zimmer vuelve a hacer un buen trabajo con la banda sonora (muy parecida a la de “Mejor… Imposible”, muy bonita y sentimental) pero la película es tan mala que hace chirriar hasta el score más elaborado así que de poco sirve…

Conclusión: “¿Cómo sabes si…?” ya tiene un puesto asegurado en la lista de las peores películas del 2011. Es una pena y una grandísima decepción viniendo de quien viene. Con Spanglish ya comenzó a decaer el nivel pero algo de magia quedaba. Ahora parece que se ha agotado por completo. No me detendré a comentar de qué va la película porque es tan aburrida y sin sentido que no merece la pena.  Las tramas principales son tan innecesarias como las secundarias y desde luego el film se hace eterno hasta querer morir de conjuntivitis postrado en la butaca. Qué más os puedo decir…