Crítica dark shadows (2012) . por nahuel avendaño

Publicado el 09 noviembre 2014 por Matias Olmedo @DragsterWav3


Sinopsis: En 1776, Barnabas Collins (Johnny Depp) es un joven apuesto y adinerado que rompe el corazón de una de sus sirvientas, que resulta ser una bruja llamada Angelique (Eva Green). Ésta decide asesinar a sus padres y posteriormente, con un embrujo, induce a su prometida, Josette Dupress (Bella Heathcote) a suicidarse. Al no resistir vivir sin su amada, Barnabas Collins intenta quitarse la vida lanzándose del mismo acantilado de donde se lanzó su amada y finalmente acaba por ser convertido en vampiro y es enterrado en vida. Cuando su ataúd es abierto en 1972, Barnabas descubre que su mansión está habitada por sus descendientes y que la matriarca es Elizabeth (Michelle Pfeiffer). Pero, Barnabas tiene algo pendiente, más allá de adaptarse a los años 70: conseguir que la bruja le libere de su hechizo y el amor de Victoria Winters (Bella Heathcote), la nueva institutriz de David que, paradójicamente, guarda un parecido con su amada Josette (Bella Heathcote).
Hasta la fecha, la última colaboración de Johnny Depp con Tim Burton, sociedad que ha dado productos muy respetables y han definido casi por completo el estilo del director, por eso Dark Shadows es casi una radiografía de sus anteriores films, con un acabado muy bueno.
Desconocía por completo el origen de la historia, puesto que la película se basa en una serie de televisión, así que al no poseer una referencia de dicho formato, señalaré lo mejor y lo peor que encontré en esta cinta.
La película comienza con una suerte de prólogo que narra el origen del protagonista y su romance con una bruja, este tramo inicial esta cargado de una potente penumbra clásica y característica de la filmografía de Burton, con algunas pinceladas de ocultismo y magia negra. Esto finaliza con la muerte del otro amor de Barnabas, una maldición que lo deja hecho un vampiro y su entierro. Después de eso, la película parece cambiar de personaje principal, con la aparición de Victoria, una chica que llega a la mansión como ama de llaves. Sus intervenciones en el desarrollo se van intercalando, ya que momentos después, el rumbo de la trama se centra en Barnabas otra vez, el cual es desenterrado y se halla perdido en los años 70, muy bien ambientados en todo sentido. Este punto es lo que da lugar a la comedia y gag's, bastante ingeniosos pero no veo que, a grandes rasgos, se equilibren con el resto de la película; cuando la escena parecía tomar un clima serio o de tensión, eso se rompía con algún chiste.
A esta altura, ya consagrado, Johnny Depp hace uno de sus mejores protagonicos, tanto que realza el desempeño de los demás actores, los cuales, a mi parecer, quedan algo desapercibidos. Si bien el nombre de Michelle Pfeiffer da a suponer un papel relevante, es poco lo que interviene en la historia. Chloë Grace Moretz sale encantadora, aunque su personaje posea una personalidad cliché y previsible, y casi al final, durante la pelea con la bruja Angelique, reaparece convertida en hombre lobo, en un intento por darle mas importancia de la que merecía. Tanto Helena Bonham Carter como Jackie Earle Haley hacen papeles pequeños pero saben aprovecharlos para acoplarse como buenos secundarios.
A lo que respecta las cuestiones de puesta en escena, así como las locaciones, son solo aplausos, los escenarios toman un papel casi fundamental al ambientar una mansión muy añeja, que no necesariamente debía de estar maltratada o ser lúgubre; con cuartos muy pintorescos, jardines y calles londinenses aportan mucho atractivo visual. Tratándose de Tim Burton, un director muy apegado a los efectos especiales y técnicas de animación, no sorprende la calidad de los mismos, ayudando a que las acciones que requerían de ellos sean completas. El maquillaje también es de tener en cuenta, Johnny Depp queda transformado en un vampiro digno de cualquier película de terror antigua, con aires "vintage", considerando las últimas camadas de filmes sobre vampirismo.
Dicho al principio, sin tener en cuenta la fidelidad con la serie televisiva, Dark Shadows se ve como una buena propuesta, mezclando tintes de comedia, drama y algo de fantasía, que son varias de las matices presentes en el trabajo de Tim Burton a lo largo de su carrera, y sin ser la mejor de sus obras, la vi muy impecable.
Puntuación: