Nota: 8'5
Lo mejor: ¿Por dónde empiezo?
Lo peor: un final que se podría clasificar como 'abierto'. Aunque esto no supondrá necesariamente un defecto para todos.
Híbrida. Mutante. Brutal. Dolorosa. Temible. Asombrosa. Perturbadora. Inquietante. Atractiva. Incómoda. Provocadora. Deslumbrante. Malsana. Hipnótica. Original. Visceral. Libre. Todas estas cosas y más es Diamond Flash. Porque después de ver la ópera prima de Carlos Vermut, uno se queda sin palabras y con una sensación extraña en el estómago. Con un presupuesto de 20.000 euros, Diamond Flash se rueda en 3 meses y se estrena directamente en Filmin en verano de 2012. ¿No es ya sinónimo de calidad que una película comience con una niña leyendo un comic de David Sanchez mientras en fuera de campo su madre discute con una trabajadora social sobre si los golpes que tiene son producto de haberse caído por las escaleras o no? “Visito a todas las mujeres que se caen por las escaleras tres veces al mes” le espeta la supuesta trabajadora social a la hospitalizada. Mediante un recurso tan sencillo como efectivo - una simple línea de guión - se nos hace entender que la acción se sitúa en el pasado (“¿No te has comprado la Super Pop?”). ¿Y que luego esa niña mantenga una conversación con su madre sobre cyborgs y superhéroes? A mí con eso ya me tienen en el bolsillo.
Es evidente que gran parte del atractivo de este filme radica en el misterio que rodea su argumento, por lo que considero un error intentar diseccionar su sinopsis. Diamond Flash es un filme donde lo cotidiano adquiere nuevas dimensiones, permitiendo la presencia de lo terrorífico de una Polaroid olvidada en un garaje; lo inexplicable de un miedo atroz a las fotografías; conversaciones en sueños con personas muertas; un baño como escenario de confesiones terroríficas; un restaurante abandonado a donde llegan superhéroes enmascarados de dudosa reputación; el destello de un diamante; planos estáticos como las viñetas de un comic; el poder de desaparecer; un pincel que no vacila a pesar de lo que ordena; un comic filmado de David Sánchez; que lo único que aprendas de tu madre sea cocinar judías con chorizo; o superar el miedo a la oscuridad para convertirte en ella; “Hago esto porque me he pasado toda la vida intentando seguir el consejo de mi madre".