Crítica de "Felices 140", dirigida por Gracia Querejeta.

ARTÍCULO POR CRISTINA HERNÁNDEZ
AMIGOS, DIVINO TESORO
Título: Felices 140. Directora: Gracia Querejeta. Reparto: Maribel Verdú, Antonio de la Torre, Eduard Fernández, Nora Navas, Marian Álvarez, Alex O’Dogherty, Ginés García Millán, Paula Cancio. Guion: Gracia Querejeta y Antonio Mercero. Distribuidora: Sony Pictures. Estreno en España: 10/04/2015. Puntuación: 4/5.
Sinopsis: Elia cumple 40 años y su aniversario le sirve de pretexto para reunir en una casa rural de lujo a unos pocos amigos y familiares. Hay algo que tiene que comunicarles: es la única ganadora del bote que el Euromillón sorteaba esa semana. A partir del instante en que los invitados son conscientes de que Elia es la afortunada a la que le han caído del cielo 140 millones de euros, el ambiente comienza a enrarecerse y lo que en un principio parecen alegrías compartidas se tornarán poco a poco en codiciosas argucias para conseguir quedarse con el dinero de Elia.

Querejeta siempre es extraordinaria. En esta ocasión, un fantástico reparto de amigos invita a reflexionar sobre cual es la verdadera fortuna en la vida. Humor y emoción forman parte de la atmósfera de una celebración de fin de semana capitaneada por una tremenda, inmensa y siempre convincente Maribel Verdú.
¿140 millones de Euros o tener fortuna en otros elementos que equilibran la balanza de la vida? Esta es la cuestión que maneja "Felices 140", la nueva película de Gracia Querejeta, una maravillosa cinta en la que de nuevo elige a Maribel Verdú como protagonista, en este caso de un drama que pone de manifiesto el precio de la amistad. El resultado de este nuevo trabajo realizado por este tándem hace perceptible la complicidad que hay entre ambas, una cualidad que se extiende entre el fantástico reparto invitado a una doble celebración de fin de semana donde no todo serán risas, ni buenas caras.
Durante 50 minutos, el humor marca los diálogos de este reencuentro de amigos, de esta reunión de alto copete en la que todo parece a desarrollarse con buen rollo. De golpe y porrazo, el tono de la cinta da un giro radical. El drama, la seriedad, la angustia, los sentimientos y la razón - o la conveniencia -  marcan el desarrollo de un clímax que sorprende al espectador. A partir de ese momento, todo cambia. Y es que, en la vida, cuando menos te das cuenta todo puede ponerse patas arriba, pero ¿qué mejor que la ayuda de un amigo para salir del atolladero? En "Felices 140" lo accidental se tornará en una causalidad con la que sacar un "algo a cambio".
De nuevo Querejeta plantea una propuesta bien perfilada, tratada y retratada que deja a manos de un reparto absolutamente convincente. Cada uno con su historia, y cada historia con sus luces y sus sombras, son elementos cargados de emociones con los que llegar a involucrarse en la película, cuyas acciones harán que te enfades con alguno de ellos. Si bien Antonio de la Torre, Eduard Fernández, Nora Navas y Ginés García Millán están excepcionales, son tres los personajes, que en mi opinión, marcan con acierto el torrente emocional del film: una inmensa Marian Álvarez, cuya mirada es un testimonio sin palabras en sí mismo, que no calla más de lo que habla pero no porque no sepa; un brillante Alex O’Dogherty, la simpatía del grupo a través de un personaje que le sienta como un guante - aunque él es un tío más sencillo -, y esa anfitriona de intensidad desbordante, Maribel Verdú, la capitana de una fiesta colmada de emociones.
Los amigos se cuentan con los dedos de una mano, porque sí, es momento de afirmar que: "amigos, divino tesoro".