Crítica: “El Eco del Miedo” (2012) de Sam Reyes

Publicado el 21 junio 2014 por Proyectorf @Proyectorfant

FICHA TÉCNICA DE LA PELÍCULA

Origen: México

Año: 2012

Dirección: Sam Reyes

Guión: Mario A. Perez Gonzalez

Elenco: Sarah Nichols, Andrea Baeza, Sol Pérez Pelayo, Vera Wilson, Susana Navarette

La película “Eco del Miedo” dirigida por Sam Reyes se trata de una producción méxicana independiente. La película empieza con la llegada de Andrea (Sarah Nichols) con una niña (María José Cisneros) y su perro a una casa antigua y descuidada, a ese nuevo hogar también va a llegar Luis (Roberto Quijano), pero eso será más adelante. La situación económica de la pareja no es la mejor, y la casa, producto de una herencia que le dejo su madre a Luis, es el nuevo refugio para empezar una nueva vida. Andrea se instala en la casa antes que su novio, por algunos trámites que Luis debía hacer para cobrar un dinero que les servirá para empezar esta nueva etapa con éxito. La relación de Andrea con la hija de Luis no es la mejor, y al llegar a la casa, Andrea intercambia unas palabras con el jardinero del lugar, Jonás (Carlos Hugo Hoeflich) que siembra la duda de la existencia de espíritus en el lugar.

Andrea no cree en los espíritus, sin embargo, conforme avanza la trama de la película se encontrará con situaciones extrañas dentro de la casa, ruidos fuertes y la soledad de una construcción grande que intimida a cualquiera. Aquí es donde gana “El Eco del Miedo”, la fotografía y, sobre todo, la musicalización llevan a introducirse dentro del ambiente de la casa y la tensión que genera un hogar antiguo, con el mito de mantener dentro de sí espíritus a cuestas, sabe generar el interés necesario para el espectador.

La comunicación entre Andrea y Luis es constantemente a través del teléfono, y mientras la llegada de Luis se dilata, las dudas y los miedos de Andrea se acrecientan. La presencia del espíritu se acerca cada vez más a los seres vivientes, y el encuentro entre Jonás y Andrea al día siguiente le dan fuego a la tensión. La actuación de Carlos Hugo Hoeflich sabe brindarle el punto tenebroso a la situación y potencia los miedos de Andrea. Allí le cuenta algunos factores importantes de la vida de los habitantes anteriores y el motivo por el cual nadie habitó el hogar durante tanto tiempo, varias muertes que forman parte del historial de la casa.

A pesar que la tensión va en crecimiento, el argumento y la historia no explotan, se quedan en los cánones habituales del género. El avance lento de los acontecimientos, que muchas veces puede ser una virtud, conspira contra la película, porque aumenta la expectativa pero no termina cumpliendo. Si bien el final requiere hacer un raconto mental de los acontecimientos, tampoco es algo completamente inesperado y hasta suena repetido, como todas las historias de terror en una casa.

Es difícil el genero de terror, donde tanto la sorpresa y como los recursos del genero ya fueron sobre explotados. Pero se puede valorar el trabajo técnico y de dirección del “El Eco del Miedo”, el manejo de la tensión argumental que supieron lograr es el punto positivo de la película.