El nuevo título de Guillermo del Toro, "La cumbre escarlata", es un homenaje a los clásicos de terror, al cine de fantasmas que se vió relevado por el de los vampiros hace ya unos años. Lo hace a lo grande, con un reparto espectacular encabezado por Mia Wasikowska a la que acompañan Jessica Chastain y Tom Hiddleston. Una película de género, entretenida, con algunas chispas de humor muy bien traídas y una ambientación fabulosa.
Ambientada en la Inglaterra victoriana, la película nos trae a Edith (Mia Wasikowska), una joven escritora muy avanzada para su época que desde joven tiene la capacidad de ver fantasmas. A través de su pluma es capaz de canalizar sus experiencias paranormales. Pese a tener un pretendiente muy atractivo (Charlie Hunnam), ella se enamora locamente de un desconocido, sir Thomas Sharpe (Tom Hiddleston), que parece compartir un extraño secreto con su hermana Lucille (Jessica Chastain).
Aunque la trama no es muy original y quizá carece de factor sorpresa, la historia te lleva con naturalidad. El uso de los efectos especiales es el adecuado, el vestuario de fantasía y los personajes tienen unos perfiles bien delimitados. Es como si estuviéramos viendo una obra de teatro clásica acompañada de las nuevas tecnologías.
Su director Guillermo del Toro, que rodó la película en menos de 70 días, devuelve a la actualidad el cine de fantasmas que había perdido fuerza dentro del género y lo homenajea desde lo más clásico, aportando mejoras técnicas que no lleguen a desvirtuar el sentido de la película. Regresa al cine de terror que retomó en "Mamá" y lo adorna de la fantasía que impregnaba a "El laberinto del fauno", e incluso repite música ya utilizada en "Hellboy".
Nos encontramos con un producto de entretenimiento puro, para los amantes del género, que no defrauda y regala algunas interpretaciones más que destacables. Gracias a nuestros amigos de Sensacine por contar siempre con nosotros e invitarnos a este interesante preestreno.
José Daniel Díaz