Crítica: Ladda Land (2011)

Por Saltparadise
By Jose Miguel Rodríguez

El cine tailandés es mayormente conocido por sus películas de artes marciales, en especial después del éxito que cosecho el artemarcialista Tony Jaa en su saga Ong Bak (de las cuales la primera es una película que todo fanático de las artes marciales debe ver). Pero, los tailandeses también tienen cierta debilidad por el cine de terror, el cual no es tan conocido como el de las artes marciales, aunque su popularidad aumenta cada vez más. Aunque soy fanático del cine de terror asiático, debo reconocer que no conocía mucho del tailandés y este título es de los primeros de esta nacionalidad que tengo la oportunidad de disfrutar.

La historia que nos presenta “Ladda Land” gira en su mayoría alrededor de Thee (interpretado por Saharat Sangkapreecha), quien es un padre de familia y se esfuerza por darle lo mejor posible a esta. En este afán, consigue un trabajo con buena paga, que le permite comprar una casa propia en la comunidad de Ladda Land, lo que significa tener que mudar a su esposa y dos hijos lejos de su original cuidad (y de su horrible suegra) y comenzar una nueva y mejor vida. El cambio de ambiente, combinado con extraños sucesos que comienzan a ocurrir en esta comunidad amenaza con destruir la estabilidad familiar que tanto Thee ha luchado por mantener y, como consecuencia, la estabilidad emocional de este y el resto de su familia.

Como ya sospecharas, estos extraños sucesos son eventos paranormales, que son desatados por una limpiadora que fue brutalmente asesinada y que ha desafiado a la muerte para atormentar esta comunidad en donde fue asesinada. Esta es la autora de muchos momentos tensos y muchos otros que me hicieron brincar en el asiento, inspirados por el director  Sophon Sakdaphisit (Phobia 2; Coming Soon),  quien supo como transmitir ese ambiente terrorífico, y más aun como transmitir unos buenos sustos. Ahora, esta historia más que ser una película de sustos se preocupa por dar una trama un poco más profunda de lo que es habitual en este tipo de cine, combinando el drama con el terror. Hasta cierto punto esto funciona, te hace meterte en la piel del protagonista y sentir sus emociones, pero es en este intento de profundizar la trama que dejan algunos sucesos sin explicación, que podrían haber sido importantes de haberlos utilizado bien, pero que al final te dejan la sensación (por no decir la certeza) que no aportaron nada al desarrollo de la película.

Ya habiendo mencionado el mayor problema de esta película me toca decir que, aun con estos detalles, me gustó mucho. Logró que me adentrara en la historia, identificándome con Thee en las diferentes situaciones por las que tiene que pasar para darle una vida digna a su familia, situaciones que se ven reforzadas por las actuaciones, que en su mayoría son bastante buenas. A su vez logró que brincara una que otra vez (para que les miento, bastantes veces) con unos sustitos bien preparados, que aunque no brillan por sus visuales, valla que son efectivos. A esto se le añade una banda sonora que no pudo haber encajado mejor con la película, ofreciéndonos música y efectos de sonido de fondo que encajan a la perfección con el ambiente que te muestran las cámaras, que también hacen su buena aportación.

Con esta experiencia me llevo un buen sabor de lo que nos ofrecen estos tailandeses en su cine de terror y definitivamente dan ganas de explorar mas sobre sus producciones. Es un gusto ver propuestas que, no cumpliendo a capacidad con lo que prometen ni con su potencial, aportan cosas nuevas al cine de terror en general y nos hacen pasar un buen rato (o mal rato, depende como clasifiques los sustos). Recomiendo esta película a los que les guste pasar ratos tensos, pero teniendo en cuenta sus defectos y consientes de que es una buena película pero tampoco demasiado sobresaliente.

Valoración: 7/10

Autor: Lestat