Lincoln acaba de conseguir un trabajo en una revista, en seguridad. El problema es que no le gusta nada dicho trabajo, porque lo que tiene que hacer es leer los correos de los empleados para asegurarse de que no utilizan los ordenadores para cosas personales. Y Beth y Jennifer si que los utilizan para eso, pero Lincoln se lo pasa tan bien leyendo sus conversaciones cada noche que no ha sido capaz de darles el típico toque de atención, y sabe que ya nunca va a hacerlo.
A pesar de que esta novela me ha gustado, por desgracia no me ha gustado tanto como las otras que he leído de Rainbow.
Supongo que esto se ha debido, en parte, al hecho de que me costó un poco cogerle el punto a la lectura. No sabía muy bien por dónde iba a tirar, ya que el libro salta de conversaciones entre Beth y Jennifer, a capítulos en los que Lincoln cuenta lo que hace en su día a día, a capítulos en los que al lector se le cuenta el pasado del protagonista, y no es que esto me haya molestado, ya que le daba agilidad a la lectura además de la intriga que causan los trozos del pasado de Lincoln, es solo que, digamos, parecía que la historia no iba hacia ninguna parte (pero obviamente sí).Los personajes me han gustado mucho, al igual que todos los que crea Rainbow Rowell, porque tienen ese toque humano que sabes que siempre vas a encontrar en los libros de esta autora. Todos cometen errores, algunos son odiosos, otros encantadores, otros ingenuos...y cada uno es distinto del anterior. Maravilloso.
De hecho, tras leer tres historias de la autora, creo que se podría decir que la magia de las mismas está en los personajes que participan en ellas, más que en las propias historias.En conclusión, ya que no se me ocurre nada más que pueda añadir a esta reseña, es un libro que no me ha gustado tanto como los otros que he leído de Rainbow pero que tampoco me ha decepcionado, lo cual se que suena un poco contradictorio, pero en fin, es Rainbow Rowell.
Y, por supuesto, recomiendo este libro a todos los fans de la autora, ya que creo que a todos les gustará, en mayor o menor medida, pero que les gustará.