Este tomo gordo continúa la publicación de la etapa de Lee&Kirby en Los Cuatro Fantásticos, uno de los títulos fundacionales del Universo Marvel. Es más flojo que el anterior. Esto se debe al lógico desgaste (en este tomo estamos por encima de los 60 nº) y a un ralajamiento del tándem autoral. A finales de los 60 Lee empezaba a tener muchas responsabilidades editoriales de modo que su participación en los guiones se fue relajando. No se nota en el desarrollo de las historias pero sí en la sequía creativa, en lo que más contrasta este tomo gordo con el anterior es en los pocos personajes y elementos nuevos presentados por él aunque tenemos a gente importante como Annihilus, en el reciclaje, en la mayor simplicidad de los argumentos y en que la incoherencia empieza a aparecer. Por ejemplo en el nº 79 EE.UU. Ben se lleva los guanteletes de El Mago a una cena con Alicia porque está nervioso y en el lugar de la cita se pega con un androide de El Pensador Loco que ha ido allí porque su programación le impelía seguir la señal emitida por los susodichos. ¿? Este tipo de inconsistencias se debe, más que a la energía de Kirby, al sistema de trabajo, el dibujante enviaba las páginas según las hacia por lo que a medida que progresaba el episodio iba olvidando detalles al no poder consultar o repasar lo precedente, Lee tenía menos tiempo para supervisar y en Marvel no se podía corregir o retocar tanto como antes porque había más trabajo. Así, el resultado es un tomo gordo irregular donde se siguen combinando a la perfección el melodrama con la aventura, el costumbrismo con la Ciencia Ficción y lo romántico con la acción, la fórmula Marvel perdida, que son el secreto de que un trabajo viejuno para niños siga teniendo encanto, atractivo e interés. También el dinamismo de la serie, el constante cambio y evolución del grupo contribuyen a las excelencias de esta etapa. Esto precisamente es lo más importante de este tomo gordo. Los 4F apenas han evolucionado, sólo Sue, la Chica Invisible, se puede considerar que lo ha hecho y ha sido por la sociedad y no por el trabajo autoral, pero el grupo sí sobre todo porque la pareja Richards ha progresado (¿algo que ver con el matrimonio de Lee?). Si en el anterior tomo se casaron y por ello el grupo se hizo más familia, en este el matrimonio tiene descendencia, lo que amplía más lo familiar provocando el mayor cambio que hasta entonces había sufrido los 4F, nuevos miembros: el primer hijo de la pareja, Franklin (personaje creado hace casi 50 años pero que en la ficción no pasa de los 10), y la inhumana Crystal, novia por entonces de la Antorcha que sustituye a Sue debido a la maternidad de esta, cosa que la hace en este tomo gordo más invisible que nunca. Con ello Lee&Kirby demostraban que uno de sus secretos era que no tenían vacas sagradas. Eran otros tiempos, se trataba de crear no de fosilizar.
Critiquita 385: Los Cuatro Fantásticos: A través del Universo, Lee&Kirby;, Marvel-Panini 2012
Publicado el 27 mayo 2013 por Lord_pengallanEste tomo gordo continúa la publicación de la etapa de Lee&Kirby en Los Cuatro Fantásticos, uno de los títulos fundacionales del Universo Marvel. Es más flojo que el anterior. Esto se debe al lógico desgaste (en este tomo estamos por encima de los 60 nº) y a un ralajamiento del tándem autoral. A finales de los 60 Lee empezaba a tener muchas responsabilidades editoriales de modo que su participación en los guiones se fue relajando. No se nota en el desarrollo de las historias pero sí en la sequía creativa, en lo que más contrasta este tomo gordo con el anterior es en los pocos personajes y elementos nuevos presentados por él aunque tenemos a gente importante como Annihilus, en el reciclaje, en la mayor simplicidad de los argumentos y en que la incoherencia empieza a aparecer. Por ejemplo en el nº 79 EE.UU. Ben se lleva los guanteletes de El Mago a una cena con Alicia porque está nervioso y en el lugar de la cita se pega con un androide de El Pensador Loco que ha ido allí porque su programación le impelía seguir la señal emitida por los susodichos. ¿? Este tipo de inconsistencias se debe, más que a la energía de Kirby, al sistema de trabajo, el dibujante enviaba las páginas según las hacia por lo que a medida que progresaba el episodio iba olvidando detalles al no poder consultar o repasar lo precedente, Lee tenía menos tiempo para supervisar y en Marvel no se podía corregir o retocar tanto como antes porque había más trabajo. Así, el resultado es un tomo gordo irregular donde se siguen combinando a la perfección el melodrama con la aventura, el costumbrismo con la Ciencia Ficción y lo romántico con la acción, la fórmula Marvel perdida, que son el secreto de que un trabajo viejuno para niños siga teniendo encanto, atractivo e interés. También el dinamismo de la serie, el constante cambio y evolución del grupo contribuyen a las excelencias de esta etapa. Esto precisamente es lo más importante de este tomo gordo. Los 4F apenas han evolucionado, sólo Sue, la Chica Invisible, se puede considerar que lo ha hecho y ha sido por la sociedad y no por el trabajo autoral, pero el grupo sí sobre todo porque la pareja Richards ha progresado (¿algo que ver con el matrimonio de Lee?). Si en el anterior tomo se casaron y por ello el grupo se hizo más familia, en este el matrimonio tiene descendencia, lo que amplía más lo familiar provocando el mayor cambio que hasta entonces había sufrido los 4F, nuevos miembros: el primer hijo de la pareja, Franklin (personaje creado hace casi 50 años pero que en la ficción no pasa de los 10), y la inhumana Crystal, novia por entonces de la Antorcha que sustituye a Sue debido a la maternidad de esta, cosa que la hace en este tomo gordo más invisible que nunca. Con ello Lee&Kirby demostraban que uno de sus secretos era que no tenían vacas sagradas. Eran otros tiempos, se trataba de crear no de fosilizar.