Estaba un día en la biblioteca de Tetuán, mirando revistas de la época del protectorado español, cuando de repente vi un artículo sobre una construcción megalítica con menhires: un Crómlech, situado en el poblado de Mezora, cerca de Larache. Lo primero que pensé: imposible. No se sabe de la existencia de estos en África.
Así que empecé a investigar, preguntar (los locales casi no conocen su existencia) y después de dos meses, cogí mi coche y fui a verlo.. Como bien suponéis, Mezora no viene en ningún mapa. Es más, mi experiencia me dice que los nombres de las ciudades que usaban los españoles no coinciden en su escritura con los usados en la actualidad. Un ejemplo: la ciudad de Xauen (palabra española) en los carteles/mapas aparece como Chef Chaouen (palabra francesa). En árabe nos la ahorraremos.
Si os gusta la aventura, después de tomar el desvío de la izquierda salís del pueblo a una carretera estrecha y asfaltada. Continuáis conduciendo y a unos 4 km, a la derecha, y medio oculto por un matorral alto (aquí hace falta un buen copiloto) aparece un carril de tierra amarilla tipo desierto por donde se atraviesan serpientes a puñados (os aseguro que yo vi 5 o 6, no vayáis andando). Al final de este carril, está el Crómlech junto al poblado de Mezora.
La sensación espacial, hay que estar allí para tenerla, es increíble. Yo fui ya abierto el día, así que la parte mágica me la tuve que imaginar. Si podéis intentar ir temprano, mejor.
El Crómlech más famoso es el de Stonehenge en Inglaterra. Yo he visto los dos, con la diferencia de que el de Stonehenge esta reconstruido. Como curiosidad, existe la posibilidad de ver este antes del horario de visitas. La sensación espacial de los menhires, la lluvia-neblina en el amanecer a las seis de la mañana,... es difícil de explicar, hay que estar allí para vivirlo.
Y poco más, os dejo las fotografías.