Lo recomendamos aquí. No nos equivocábamos. En esta crónica vamos a intentar sintetizar lo vivido en la Sala La Comedia de Jerez de la Frontera el viernes 19 de septiembre de 2014, tras el brillante paso de la banda cordobesa The Buzz
Y lo primero que hay que explicar, es que formaciones como esta es la que dan sentido a los tributos, ya que ante la imposibilidad, por motivos obvios, de poder asistir a un concierto de Nirvana, The Buzz Lovers es lo que más se puede acercar, ya que tanto por estética, puesta en escena y sonido recrean el ambiente de la inmortal banda de Seattle.
En formato trío, con un parecido físico impresionante, sobre todo el de su guitarra y voz, Kane con Kurt Cobain, desplegaron en una hora y media de actuación un exhaustivo repaso a toda la discografía de Nirvana, desde el “Floyd the barber” del “Bleach” hasta el “Smell like teen spirit” del “Nevermind”. De hecho, del primer disco “Bleach”, además del tema mencionado pudimos escuchar en la noche jerezana, “About a girl”, “School” y el “Love buzz” que da nombre al grupo, del exitoso “Nevermind”, aparte de aquel primer single citado unos párrafos más arriba, sonó “Drain you”, “In Bloom”, “Come as you are”, “Stay away”, “Lithium” y “Territorial pissings”, del oscuro “In utero”, nos ofrecieron “Heart shapped box”, “Tourette´s”, “All apologies” y “Rape me”, del complejo “Incesticide”, interpretaron “Been a son”, la version de The Vaselines “Molly´s lips” y “Aneurysm”, canciones a las que hay que sumar el “The man who sold the world” de David Bowie, de aquel mítico desenchufado para la MTV y la inédita (apareció por el 2002) “You know you´re
Porque de verdad, este es un tributo de los que no se olvidan, empezando con su vocalista y guitarra, Kane, de asombroso parecido físico, timbre y presencia muy similar a Kurt Cobain. Con saltos por el escenario, caídas y conexión con el público tocando sus dos instrumentos, una Fender Jag stang, el mismo híbrido de jaguar y Mustang que propuso el propio Cobain y una Fernandes, supongo, con la misma pegatina con la leyenda “Vandalism as beatiful like a rock in a cop´s face”. El remedo de Krist Novoselic se hace llamar Agre y ataviado con un bajo Epiphone, es el encargado de hablar con el público y de ofrecer otro recital de puesta en escena. Casi tanto como la poderosa pegada de su batería Gonzo, que parece estar escuchando al mismísimo Dave Grohl. La capacidad de los tres nos transporta al espíritu “grunge” de los noventa.
Por José Luis “El Director”.