Partido correspondiente a la ida de los octavos de final de la Champions League celebrado en el estadio Santiago Bernabeú de Madrid el 13 de febrero de 2013. Concluyó con empate a 1, los goleadores fueron Welbeck por parte de los ingleses y Cristiano Ronaldo por los españoles.
1.- Dos valladares en las porterías. Diego López, en el gol seguramente pudo hacer algo más, estuvo tímido en las salidas, permitiendo que el balón rondara por el área pequeña blanca en alguna ocasión. Sacó 2 balones clave que pudieron sentenciar la eliminatoria, buena actuación global.
De Gea pelearía por el honorífico galardón de mejor jugador del partido, tuvo una serie de intervenciones decisivas, estuvo muy seguro y blocó casi todos los balones que le llegaron permitiendo muy pocas segundas jugadas. En el gol no pudo hacer mucho.
2.- La defensa blanca ha alternado altos y bajos, Varane se ha mostrado, una vez más, seguro, pero en general se han concedido demasiadas oportunidades, bien es cierto que el centro del campo no les ha ayudado mucho, el equipo, al bajar físicamente se ha partido y los que más lo han sufrido han sido los de atrás.
Todo lo contrario ha sucedido en el otro área, la defensa del United ha jugado muy arropada y ha contado, en todo momento, con la ayuda de centrocampistas y delanteros propiciando superioridades numéricas.
3.- El centro del campo del Real Madrid ha logrado su cometido a medias, mucha posesión, en parte consentida por el rival, pero poca profundidad. Defensivamente tampoco ha sido el mejor partido, se ha notado el bajo nivel físico de Xabi Alonso que ha entrado en juego menos de lo habitual. Mourinho se ha visto obligado incluso a cambiarlo para dar un poco de aire. Modric quizá llegó un poco tarde pero en partidos así de atascados, su sociedad con Ozil debe ser garantía de verticalidad.
Los centrocampistas ingleses se han multiplicado para frenar el avance madridista y lo han logrado en la mayoría de las ocasiones, impecable trabajo táctico y técnico.
4.- Cristiano Ronaldo marcó el tanto local, se le vió con ganas y participativo pero sin suerte, partió desde demasiado atrás, con la defensa visitante posicionada, lo que propició que muchas de sus armas quedaran desactivadas, quizá habría tenido que jugar más en punta, tirando desmarques para que Ozil o Modric lo pusieran en disposición de gol. Di María, buena actitud, algo más acertado que últimamente pero le falta para alcanzar su nivel anterior.
Caso aparte merecen Benzemá e Higuaín, sombras de lo que fueron el año pasado, a pesar de sus lesiones hay más factores a analizar para propiciar este bajón tan sensible.