Crónica: Rusos blancos @ Slow, Barcelona (26 de abril)

Por Bandalismo @Bandalismonet

Tras su paso por la sala El Sol de Madrid el pasado 17 de abril, Rusos Blancos concedieron esta vez en la sala Slow de Barcelona, como presentación de su nuevo disco " Tiempo de nísperos, un íntimo y cálido concierto, que terminó por hacer bailar a todos los asistentes.

Superados ciertos problemas de horario en los que, sin duda alguna, no tuvieron nada que ver los artistas (de hecho ambos grupos llegaron antes incluso de que abriese el local), pudimos subir a la segunda planta de este "templo del cóctel", desde luego sitio idílico para un concierto de Rusos Blancos (cabe aclarar que ruso blanco es un combinado a base de vodka, Kahlúa y nata).

Así, sin más dilación, pudieron comenzar a tocar los locales Gúdar. La verdad, eran totalmente desconocidos para mí, y a pesar de esto y del escaso tiempo con el que contaron para darse a conocer, supieron llevar al público donde querían. Con un pop muy personal y unas guitarras muy potentes engatusaron al público casi desde el comienzo. Sea por su condición de locales, o por el buen hacer de la actuación, el personal terminó pidiendo bis y, seguramente por culpa del horario, nos quedamos sin disfrutarlo.

Sin apenas tiempo para evacuar algún que otro combinado ingerido, las chicas y chicos del grupo formado en Madrid y comandado por Ernie Producciones se subieron al escenario y desenvainaron sus instrumentos. Quizás por falta de espacio, la banda sólo contaba con cinco de sus seis miembros, dato que perdió importancia en cuanto empezaron a rodar.

Comenzaron el repertorio con las que, personalmente, son mis canciones favoritas del nuevo disco: 'Hogareña' y 'Oro, disfruto'. La primera nos deleitó con su minuto inicial íntegramente melódico, unos riffs de lo más pegadizos y un impecable sonido de guitarra distorsionada; y la segunda con esa sátira tan característica de las letras escritas por Manu Rodríguez, voz del grupo.

Tras estos dos primeros temas comenzaron a alternar canciones de todos sus trabajos. Una de las más destacadas fue 'Más delgado', en la que las voces femeninas (Laura Prieto y Elisa Pérez), como en casi todas las que intervienen, quedaron de lujo. Como bien nos recalcó Manu, el setlist, por no haber podido ensayar, era totalmente improvisado. De su último trabajo nos ofrecieron casi todo el disco, quedando por tocar sus temas más tranquilos y austeros.

Muchos grupos acostumbran sacar discos muy trabajados y nítidos, pero llegada la hora del directo acaban mostrando vulnerabilidad. Venden humo. Por contra, Rusos Blancos son de estos conjuntos que, escuchando el directo y cerrando los ojos, te hace dudar de si estás en tu casa o delante de ellos. Incluso podría decir que suenan más potentes "en persona".

Con 'Baile letal 3′, esos aires de disco setenteros, junto con la ambientación de la sala, crearon un clima que atrajo mucho a los asistentes, y a pesar de sonar impecable... ¡me faltó ver ese baile al más puro estilo Tony Manero que se marcó Manu Rodríguez en El Sol!

Tras un amplio y completo repaso de toda su música, llegó la hora de recoger, pero no sin los reclamados bises. Primero con '(Todo es tan) teenager', la cara más pop y juvenil de la noche. Como colofón, la canción elegida fue 'Supermodelo', por supuesto la más bailada.

Muy buenas sensaciones me han dejado como debutante en su directo. Me quedo con ganas de verlos en un escenario más amplio y con un mayor número de oyentes. Sin duda, si siguen por esta línea, fans no les van a faltar.


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