Crónicas Cannes 2012: "Beyond the Hills" la monjas de Cristian Mungiu te ponen a prueba

Publicado el 20 mayo 2012 por Fimin

20 de Mayo del 2012 | etiquetas: Festival de Cannes, Festivales 2012  Compartir

Las primeras noticias sobre su (¿secreto?) rodaje nos llegaban hace unos escasos meses. The Playlist se hacía eco de su más que posible incursión en el la Sección Oficial de Cannes...y dicho y hecho. La nueva y esperada vuelta al ruedo del ganador de  la Palma de Oro en Cannes por "4 meses, 3 semanas, 2 días" por fin tomaba cuerpo tras 5 años en los que únicamente se ha puesto tras la cámara para rodar un segmento de las desternillantes "Historias de la edad de oro". Y así, por fin, Cristian Mungiu vuelva a pisar La Croisette con un film que, a su particular manera, coquetea con el género del terror a través de enfermedades mentales y exorcismos de por medio. Ayer llegaba su gran día en Cannes. ¿Veredicto?.

¿De qué va?

Alina regresa a Rumanía desde Alemania para llevarse a Voichita, la única persona a la que jamás amó y la única que le correspondió. Pero Voichita ha encontrado a Dios y en cuestión de amor es muy difícil competir con Dios.

¿Quién está detrás?

El ganador de la Palma de Oro y principal abanderado de la nueva ola rumana, Cristian Mungiu.

¿Quién sale?

Se llaman Cosmina Stratan, Cristina Flutur, Valeriu Andriuta y Dana Tapalaga.

¿Qué es?

4 meses, 3 semanas, 2 días + Requiem (El Exorcismo de Micaela) + Los Demonios de Ken Russell

¿Qué ofrece?

Su carta de presentación nos la ofrece Fabian Lemercier en Cineuropa: "Pese a su longitud, la cinta mantiene un mismo ritmo con un único plano por escena sin que las acompañe la más mínima nota de música. El espectador debe mantener la atención durante los 150 minutos que dura la película".

Presentación con la que coincide, aunque sin excesivo entusiasmo, E. Rodríguez Marchante en ABC: "Lo cierto es que produce más perplejidad y desasosiego que emoción, aunque es sin duda una película muy, muy rigurosa, ese calificativo que en la bolsa del cine fetén cotiza como una gran petrolera".

Sergi Sánchez, por su parte, muestra su decepción en La Razón: "La precisión milimétrica de su anterior largometraje, auténtica lección de cómo dominar el «tempo» dramático de la escena, se transforma aquí en divagación panorámica y elogio de la repetición. Encerradas en el ciclo infernal de sus propias pasiones e incertidumbres, las protagonistas se pierden en una cacofonía de gritos y plegarias desatendidas, que saturan dos horas y media". Para acabar concluyendo: "¿No quieres caldo?, pues toma tres tazas, piensa Mungiu. Y en cine, mejor una y bien humeante".

Opinión con la que también coincide Carlos Boyero en El País: "Lo que cuenta Mungiu es intenso y trágico, pero también espeso y fatigosamente repetitivo. Te contagia el malestar y el miedo durante un rato, pero el problema es que su historia dura innecesariamente 150 minutos y a partir de la primera hora ese retrato del dolor y del paroxismo se te hace eterno".

Y Luis Martínez en El Mundo: "El director vuelve a insistir en las claves de antaño para ir más alto, más lejos... y peor. (...) es una disección de la religión en general y del fanatismo en particular tan turbador como, admitámoslo, brutal. Y brutal, eso sí, en el más amplio y escrupuloso de los sentidos. Atosigante sería más correcto. Lo diremos: un auténtico mazazo (ladrillo, dirán algunos) lanzado a la cara. (...) De lo que adolece 'Beyond the hills' es de argumentos suficientes para conseguir que la historia avance más allá de la repetición de los mismos gestos, los mismos diálogos, idéntica desesperación".

En cuánto a la prensa internacional, señalar que la acogida ha sido bastante más positivas aunque ninguna la equipara a "4 meses, 3 semanas, 2 días":

Dave Calhoun le otorga 4 estrellas en Time Out señalando que "el estilo de narración empleado por Mungiu en "Beyond the Hills" resulta más alargado y menos frenético que en '4 meses ...'. Este es un trabajo menos inmediato y accesible que entierra sus temas de forma más profunda aún. Juntas, las dos películas funcionan como fascinante díptico sobre los estudios de la libertad o la falta de ella y, en un nivel más amplio, sugieren una enfermedad persistente y el crónico dolor en el corazón de la sociedad rumana".

Stephen Dalton no duda en ponerla entre las favoritas al palmarés razonando en The Hollywood Reporter que "Beyond the Hills es menos divertida que cualquier otra película sobre monjas lesbianas y sus psicóticas ex amantes. Pero es un retrato apasionante y confirma la maduración del talento de Mungiu por las historias universales que definen el presente y el pasado político de Rumania" y nombra referentes tan sugerentes como "Black Narcissus" de Powell y Pressburger, "Viridiana" de Buñuel, "Los Demonios" de Ken Russell o incluso "Entre Tinieblas" de Almodóvar"

Al igual que Kevin Jagernauth de The Playlist: "Magnifica fotografía, y una dirección exigente (para algunos áspera) de mínimos movimientos de cámaras y tomas largas. Beyond the Hills funciona como un juego de resistencia durante dos horas y media. Sin embargo vale la pena soportar el ritmo, las recompesas son abundantes. Engañosamente compleja con un centro emocional que se despega como las capas de una cebolla. El gran esfuerzo de Mungiu contempla al amor y la fe como dos diferentes tipos de veneno".

La mejor conclusión posible quizá nos la ofrezca Justin Chang en Variety afirmando que "Las tensiones entre lo espiritual y lo secular, grupos e individuos, se examinan con absorbente inteligencia y sugerente insinuación aunque no de forma totalmente satisfactoria en el último trabajo de Cristian Mungiu".

O Dan Fainaru en Screen: "La película de Cristian Mungiu es una representación inusual de un caso de exorcismo rumano destinada a dividir tanto el público como opiniones críticas. Algunas la destacarán como un gran logro y otras le echarán la culpa por su extenuante sensacionalismo pretencioso. Pero el caso es que causará de todo menos la indiferencia".

Finalmente, señalar que en Micropsia actualmente tiene una media de 6,55. Entre las notas más destacadas el 8 de Alejandro G. Calvo (Sensacine), el 7 de Carlos Reviriego, el 7 de Carlos F. Heredero o el 7,3 de Eulalia Iglesias, todos ellos de Cuadernos Caimán.