Esta semana me apetecía llenarlo todo de harina, amasar, hacer masa madre, hojaldre, así que me he liado la manta a la cabeza y me he esmerado para hacer un postre delicioso que quizás muchos todavía no conozcáis. ¿Te imaginas qué puede salir si fusionamos un donut con un croissant? Pues el resultado son estos apetecibles CRONUTS. El donut de siempre con la textura hojaldrada del croissant. Esto es pecado sí o sí, pero ya tendrás tiempo de enmendarlo comiendo un poquito de verdura otro día. ¿Te quedas conmigo para aprender paso a paso esta receta?
La receta ha salido perfecta porque he usado la de una gran experta que con sus vídeos nos enseña cada día cosas nueva a todos los que, poco a poco, vamos descubriendo los secretos de la repostería. Noe de "Lolita La Pastelera", va por ti.
INGREDIENTES PARA LA MASA MADRE:
ELABORACIÓN:
1. Vierte el agua templada en un bol. No debe estar hirviendo ni excesivamente caliente para no "matar" el fermento que lleva la levadura.
2. Añade la levadura desmenuzada y remueve con una cuchara hasta que se disuelva por completo.
3. Poco a poco, incorpora la harina hasta que la mezcla se vaya convirtiendo en una masa.
4. Cuando ya no puedas trabajar la masa dentro del bol, vuélcala sobre una superficie de trabajo y amasa a mano.
5. Una vez que la masa sea homogénea y con una superficie lisa, deposítala de nuevo en el bol y cúbrelo con film transparente. Déjala reposar una hora en un lugar donde haya una temperatura constante. Por ejemplo, yo la he dejado dentro del horno apagado.
6. Transcurrida una hora, la masa madre habrá aumentado su volumen y ya estará lista para poder usarla.
MASA DE HOJALDRE:
INGREDIENTES (para 12-15 cronuts):
ELABORACIÓN:
1. Tamiza la harina de fuerza en el bol de tu amasadora.
2. Incorpora el azúcar.
3. Vierte la leche.
4. Comienza a amasar con el gancho de tu batidora para que se vayan integrando estos ingredientes.
5. Añade los huevos a la vez y sigue amasando.
6. Ahora es el momento de incorporar la mantequilla, que debe de estar a temperatura ambiente y un poco blandita para que se integre mejor con la masa.
7. Amasa hasta que la mezcla sea homogénea y se empiece a separar de las paredes del bol.
8. Añade por último la masa madre y sigue amasando hasta que quede una mezcla homogénea.
9.
Al ser una masa laboriosa de hacer, he hecho el doble de la receta de Lolita La Pastelera, para optimizar el tiempo y tener más cantidad de cronuts. Llegados a este punto, puedes dividir la masa en dos para que te resulte más sencillo trabajarlas. Haz un corte profundo en forma de cruz en el centro de la masa y déjala reposar en el frigorífico durante 30 minutos.AMASADO DEL HOJALDRE:
1. Una vez que la masa ha reposado, deposítala sobre una superficie enharinada.
2. Estira con un rodillo cada una de las aspas de la cruz hacía afuera haciendo una cruz más grande. El centro de la cruz deberá quedar un poco más grueso, como si tuviera un pequeño montículo, sobre el que depositaremos 100 g de mantequilla a temperatura ambiente.
3. Pliega cada una de las aspas hacia el centro, una sobre otra.
4. Cuando estén todas plegadas, quedará una especie de paquete cuadrado.
5. Da unos golpecitos con el rodillo para ablandar la mantequilla y enharínalo un poco antes de amasar para evitar que se pegue la masa. Estíralo en vertical, en un sólo sentido, con movimientos hacia arriba y hacia abajo, nunca en horizontal.
6. Agarra con cuidado el extremo superior de la masa y haz un pliegue hasta la mitad. Haz lo mismo con el extremo inferior: pliégalo hacia el centro. Debe quedarte una masa en forma de cuadrado.
7. Repite los mismos pasos con la otra bola de masa. Déjalas reposar 20 minutos en el frigorífico. Transcurrido este tiempo, vuelve a poner la masa sobre una superficie enharinada tal y como te muestro en la foto. En este caso será en el sentido contrario del que hemos amasado anteriormente para que formen bien las capas del hojaldre.
8. Vuelve a estirar la masa con el rodillo y vuelve a doblarla sobre sí misma como en los pasos 5 y 6. Deja reposar en el frigorífico otros 20 minutos. Repite estos mismos pasos otra vez más y deja reposar otros 20 minutos. En total debes estirar, plegar y dejar reposar la masa tres veces. Si te parece mucha cantidad, puedes congelar una parte de la masa envuelta en film transparente. Cuando la vayas a usar, solo tendrás que descongelarla y darle el último estirado antes de cortar los cronuts.
9. Estira la masa por última vez dejando un grosor de un dedo de ancho aproximadamente. Corta con un vaso los cronuts. Te aconsejo que intentes optimizar lo mejor posible el espacio para hacer la mayor cantidad de cronuts que puedas.
10. Haz el agujero del cronut con una boquilla o con un cortador pequeñito.
11. Deposítalos sobre un papel de horno y déjalos reposar 30 minutos. La masa sobrante, los "retales", como digo yo, no se pueden volver a amasar porque con el calor de las manos y la mantequilla que llevan, se convierten en una masa pegajosa que ya no nos sirve.
12. Como la masa es muy delicada y no queremos manipularla mucho con las manos, corta el papel de horno con unas tijeras en forma de círculo alrededor de los cronuts.
13. Pon abundante aceite de girasol en una cazuela y, cuando esté bien caliente, baja la potencia a la mitad y espera un poco antes de freírlos. Son muy delicados y el aceite excesivamente caliente puede hacer que las laminas del hojaldre se separen. Fríelos de uno en uno hasta que estén doraditos, pero ten cuidado porque se hacen muy muy rápido. Un consejo: para que te sea más sencillo darles la vuelta, utiliza un palillo de comida china.
14. Déjalos enfriar sobre un papel absorbente.
15. Espolvoréalos con azúcar y, si te gusta, un poco de canela. También los puedes rellenar usando una manga y una boquilla pequeñita con crema pastelera, mermelada, crema de cacao, dulce de leche... con lo que se te ocurra.
La masa de hojaldre es bien sencilla de elaborar. El único inconveniente son los tiempos de espera para que la mantequilla se asiente en la masa y nos sea más fácil trabajarla. Si este paso te supone un inconveniente, puedes usar hojaldre fresco o congelado, que puedes encontrar en cualquier supermercado. Pero no hay nada mejor que hacer algo tú mismo desde el principio y ver que has sido capaz de hacerlo hasta el final.
Es un proceso laborioso pero merece la pena y el resultado final son estos cronuts deliciosos para tomar a cualquier hora.
¿Has visto cómo se notan las capitas de hojaldre? Son una delicia tanto de comer como para observarlos. Comprobarás que has hecho bien el trabajo si ves esa textura de croissant bien jugosa y con láminas de masa. Están riquísimos, jugosos, se deshacen en la boca, así que te recomiendo que no te lo pienses mucho y te pongas manos a la obra ya.
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Nos vemos la semana que viene con otra receta. Sólo te puedo adelantar que si eres un amante del chocolate estás de suerte. ¡No te la pierdas!
Un abrazo enorme y gracias por estar ahí siempre.
Jon