¿A quién no le gustan unas croquetas caseras? Éstas son las mejores croquetas de pera y queso azul del mundo, ¡están brutales!
Las croquetas son uno de los aperitivos más típicos de la cocina española y como sabes, las recetas de recetas de croquetas son, además, uno de los mejores ejemplos de la cocina de aprovechamiento. En mi caso, tenía 3 peras un poco abandonadas y algo maduras, así que empecé a pensar en recetas para hacer algo rico con ellas.
Para hacer estas croquetas de pera y queso azul vas a necesitar muy pocos ingredientes: pera, queso azul, cebolla y bechamel, y para empanarlas huevo y pan rallado. Una vez rebozadas puedes congelarlas y vas sacando a medida que las necesites.
Las he hecho a mano y aunque son algo entretenidas, cuando las pruebas recién hechas y veas que quedan crujientes por fuera y jugosas por dentro, te darás cuenta de que vale la pena el trabajo.
Más abajo te voy a explicar cómo hacer bechamel perfecta para hacer croquetas y que te queden muy cremosas.
Aquí tienes otras recetas como sugerencia donde se utiliza en su elaboración bechamel, como es la dorada con bechamel de pimiento, puerros gratinados o la clásica lasaña con verduras.
¡Vamos con la receta!
Ingredientes
Elaboración de las croquetas de pera y queso azul
-Rehoga la cebolla bien picadita.
-Añade la pera a trocitos pequeños y deja que caramelice unos minutos junto a la cebolla.
-Retira del fuego y pásalo a un recipiente alargado.
-Trocea el queso con la mano y repártelo por todo el recipiente.
-Prepara la bechamel
Elaboración de la bechamel perfecta para hacer croquetas
-Haz un roux, para ello pon a calentar la mantequilla en un cazo y cuando se haya fundido, añade la harina de golpe. Deja cocinar unos minutos a fuego medio sin dejar de remover.
-Mientras, pon a calentar en otro cazo la leche.
-Cuando la leche empiece a hervir añádela sobre el roux. Apaga el fuego y remueve bien con una varilla. Al principio la bechamel queda muy líquida pero poco a poco va cogiendo cuerpo, es muy importante que se remueva constantemente con varilla para evitar que se hagan grumos.
-Cuando la bechamel esté casi fría, añádela al recipiente donde está la pera y el queso. Mezcla bien con una espátula o lengua de silicona, cubre con film y deja reposar mínimo 30 minutos en nevera. Aunque te aconsejo dejarla toda la noche como hice yo.
-Al día siguiente, forma con ayuda de dos cucharas las croquetas, o fórmalas con las manos bien limpias. Pásalas por huevo y pan rallado, y repite esta acción una vez más.
-Una vez rebozadas las puedes colocar en una bandeja y meterlas en el congelador, y cuando estén del todo congeladas ya las puedes pasar a una bolsa para ahorrar espacio.
-Puedes freírlas en una sartén con AOVE o hacerlas al horno a 200ºC durante 15-20 minutos, girándolas a mitad de cocción para que queden doradas por ambos lados.
Y a disfrutarlas!
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