Croquetas de queso y gulas

Por Laura Laura García Puebla @Cucharaenmaleta
Basándome en la receta de croquetas de jamón de Alberto Chicote he realizado estas de gulas con queso que están de vicio, para mí una de las mejores croquetas que hecho. Además, hice la mitad con pan casero rallado y la otra con pan rallado comprado. Se nota bastante la diferencia, ya que las segundas están más compactadas que las primeras. Así que en esta receta os explicaré cómo realizar pan rallado casero y así podéis emplearlo en alguna de vuestras preparaciones, en la fotografía la rectangular es que está realizada con el pan rallado casero, mientras que la redonda está hecha con el comprado.
Ingredientes:
-   660 mililitros de leche entera.
-   330 mililitros de nata para cocinar.
-   55 gramos de mantequilla.
-   45 gramos de aceite de oliva.
-   Media cebolla.
-   95 gramos de harina.
-   200 gramos de gulas.
-   1 diente de ajo.
-   150 gramos de queso crema.
-   Sal y pimienta.
-   Nuez moscada.
-   Para el rebozado:
o   2 huevos.
o   Pan rallado casero.
o   Harina.
o   Aceite de oliva virgen extra para freír.Elaboración:En una olla echamos la mantequilla y el aceite y la cebolla y el ajo muy picaditos y cuando la cebolla está transparente añadimos las gulas.Una vez que están un poco cocinadas, añadimos la harina y la dejamos cocinar durante diez minutos no dejéis de remover para que no se os pegue, luego incorporamos a base de cazos la leche y la nata que estarán a una temperatura templada y vais ligando la bechamel. No dejéis de darle vueltas para que no se os formen grumos. Echamos la sal, la pimienta y la nuez moscada. Seguimos dando vueltas durante cinco minutos más y añadimos el queso crema, esperamos hasta que todo se ligue y la bechamel se despegue de las paredes de la olla.Echamos la bechamel en una bandeja y la dejamos enfriar, la tapamos con un film transparente y la metemos al frigorífico donde deberá pasar varias horas o de un día para otro. Mientras tanto podéis realizar vuestro pan rallado casero es muy sencillo, cogemos un pan que esté duro y lo cortamos en rebanadas, lo metemos en un procesador de alimentos y trituramos, también lo podemos rallar, pero os llevará más tiempo. Lo trituramos a nuestro gusto más fino o más grueso, luego lo ponemos en una bandeja de horno y lo metemos a 150º durante 15 o 20 minutos para que se sequé, el tiempo dependerá de los días que tenga el pan, cuanto más seco esté menos tiempo necesita en el horno. Lo sacamos dejamos que se enfríe y ya está listo para utilizar. Luego le podéis echar los aderezos que más os gusten: ajo en polvo, perejil, orégano… Continuando con nuestras croquetas, sacamos nuestra bechamel del frigorífico y le vamos dando la forma que más nos guste, luego colocamos tres cuencos con harina, huevo batido y pan rallado y las vamos pasando por cada uno de los cuencos, harina, huevo batido y pan rallado. Podéis hacer un rebozado simple o doble como más os guste. Una vez que tenéis rebozadas las croquetas, llega el momento de freírlas, ponéis abundante aceite de oliva en la sartén y a fuego medio-alto comenzáis a freír las croquetas por tandas, las sacáis a un papel absorbente y ya están listas para servir. En la foto veréis una rectangular que es la realizada con el pan rallado casero y la redonda que es la que está hecha con el comprado, a mí me gustaron mucho las dos. Tiempo de preparación: 2 horas. Gasto: 4 euros. Raciones: 20 croquetones. Dificultad: Fácil.