Croquetas Veganas de Brócoli y Pasas

Por Gastro Cecienta


Hoy vengo con dos exclusivas: 
La primera, a partir de ahora los viernes publicaré una receta en colaboración con Freshvana, un grupo de agricultores con más de 29 años de experiencia en el mundo de la agricultura ecológica. Su filosofía: "conseguir frutas y verduras con el sabor de toda la vida y ricas en vitaminas, antioxidantes y otras sustancias beneficiosas para tu salud."

Brócoli ecológico ¿bonito verdad?

Desde su tienda online podréis hacer la compra tanto de frutas y verduras como de otros alimentos ecológicos. Sencilla y deliciosa forma de tener nuestra compra ecológica en casa, con producto directamente del agricultor. De mi cesta semanal me hicieron ojitos, entre otros, un par de brócolis, rebosantes de vida, en ese momento supe que eran merecedores de formar parte de una receta de éxito asegurado... ahí viene la segunda exclusiva:
He dado con las croquetas veganas más sabrosas del mundo mundial, así como te lo digo...¿qué no te lo crees?, anímate con la receta y después me cuentas, estoy tán contenta del resultado que siento la necesidad de gritarlo a los cuatro vientos. ¡¡Ronda de corquetas para todos!!

Para unas 20 unidades.
2 cucharadas de aceite de oliva virgen1 brócoli *1/2 cebolla *2 cucharadas de pasas1 pizca de sal marina 1 pizca de pimienta negra molida1 chorretón de vino blanco
Para la bechamel2 cucharadas de aceite de oliva virgen2 cucharadas colmadas de harina de amaranto (o la que prefiráis)3/4 partes de un vaso de bebida vegetal de almendras 1 pizca de sal marina1 pizca de pimienta negra molida1 pizca de comino molido
Para rebozarPan rallado con ajo y perejil
*Verdura ecológica de Freshvana
Primero vamos a empezar con el relleno, en este caso la combinación del brócoli con las pasas ha sido todo un éxito. En una sartén vamos a poner el aceite a calentar, añadimos la cebolla muy picadita, a continuación el brócoli, igualmente muy picado (los tallos podeís reservarlos para otra preparación). Rehogamos unos minutos a fuego medio, salamos, especiamos y añadimos el vino blanco y las pasas (también picaditas). Dejamos durante una media hora cocinándose a fuego medio-bajo, para que no llegue a tostarse y quede tierno y meloso.
Por otro lado, preparamos la bechamel, en mi caso he usado harina de amaranto, es de sabor potente, que a mi parecer va estupendo en combinación con la dulzura del relleno. Podeís sustituirla por la harina que más os guste, aunque variará el delicioso sabor final... 
Calentamos el aceite, añadimos la harina, la rehogamos bien, hasta dorarla. Vamos poco a poco añadiendo la bebida de almendras (u otra al gusto) removiendo sin parar para que no haga grumos, una vez incorporado el vaso nos habrá quedado una bechamel melosa, pero con consistencia para poder después formar las croquetas, salamos y especiamos.
Unimos las dos mezclas, ponemos en un recipiente y tapamos con papel film sobre la masa para que no haga costra; dejamos toda la noche (o el máximo tiempo del que dispongaís) que repose la masa. 
Formamos con la masa bolitas, dándoles la forma deseada y las vamos pasando por el pan rallado, en mi caso con ajo y perejil. En este punto, podemos freirlas al momento o congelarlas.
Yo normalmente suelo congelarlas, es una buena forma de dejar las croquetas más tiernas en el interior sin que se nos deshagan al freirlas. 

Crujientes por fuera, melosas por dentro...


Para freirlas, abundante aceite, doramos y listas para comer... ¿os animáis a probarlas? Son una maravilla, la combinación de sabores es pura delicia.
Pues hasta aquí mis dos exclusivas antes de empezar el finde, no está mal ¿verdad?... mis mejores deseos para el fin de semana... 
¡¡A croquetear!!