Aunque en vez de "cruasán o croisant de pan de leche sin huevos" se podría llamar perfectamente el bollito de leche que quiso ser cruasán,, en definitiva es que está delicioso para los desayunos y las meriendas.
Son perfectos para rellenarlos con embutidos, el contraste de sabor dulce y salado me encanta y si se rellenan de nutellla ya es una gozada,
Son aptos para las personas que tenga alergia a los huevos,
En casa no tenemos alergia a los huevos, pero esta receta salió de un despiste, ya que cuando los estaba horneando me acordé que no le había puesto ningún huevo en la masa, excepto el que le puse para darle brillo, para las personas alérgicas en vez de poner huevo para dar brillo, aconsejo pincelar con leche.
Son unos bollitos sin huevos ni mantequilla.
Y para los intolerantes a la lactosa sustituir la leche normal a una sin lactosa.
Ingredientes:
500 gr de harina (Mercadona con 10,3 gr de proteína)
200 gr de leche con o "sin lactosa"
el zumo de medio limón (total 10 gr de zumo de limón )
100 gr de azúcar normal
100 gr de aceite de girasol
25 gr de levadura fresca
1 cucharadita de café de sal.
1 cucharadita de café de vainilla líquida, "es opcional" yo no le puse y por el sabor final tampoco lo hizo falta.
Para dar brillo:
Un huevo batido, si eres alérgico al huevo pincela con leche para dar color
Preparación:
Ponemos en un bol la harina, el azúcar y la sal, calentamos un poco la leche y disolvemos la pastilla de levadura fresca, hasta que se haya disuelto, le añadimos el zumo del limón y dejamos en reposo unos 10 a 15 minutos veremos que la leche se corta.
Vertemos la leche en el bol junto con el aceite, comenzamos a remover con una cuchara, para seguir luego con la mano, amasamos un poco hasta que se integren todos los ingredientes, observaremos que se forma una masa blanda suave al tacto y que no se pega.
Tapamos con papel film o un trapo en un sitio que no haya corrientes y dejamos levar, hasta que duplique su tamaño, yo lo guardé en el horno de la cocina apagado claro. Una vez que haya levado la masa desgasificamos un poco y le damos forma.
Estos bollitos cruasanes no tienen una forma delicada, estirada ni milimetrada, como el cruasán francés, sino que son un poco rústicos y singulares en su forma, ya que salieron de la improvisación de darles un guiño en su forma que recordase a los cruasanes.
Los estiré a mano sin rodillo aplanando la masa a un centímetro de grosor más o menos y dándole forma de triángulo y enrollándose de la parte más ancha a la más estrecha.
Aunque le podréis dar la forma que queráis, el clásico bollito redondo, pero a mí personalmente me ha encantado el aspecto de cruasán rústico que tienen y lo mejor de todo es que están buenísimos.
Una vez que le hemos dado la forma los pincelamos con huevo, o leche, dejamos levar de nuevo de 30 a 45 minutos, o hasta que veamos que han subido nuevamente.
Pre calentamos el horno a 180 grados, introducimos en el horno y los dejamos hasta que veamos que están dorados, de 20 a 25 minutos aproximadamente, el tiempo también dependerá de los dorados. que los queramos.
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Con estas cantidades os saldrán bastantes a mi me salieron unos 11 o 12 aproximadamente de 70 a 80 gramos cada uno, son grandecitos, si los hacéis de 50 gramos saldrán bastantes más, con la opción de que se pueden congelar y sacarlos conforme se vayan necesitando.