A pesar de decidir el pasado año que íbamos a tardar mucho en repetir el típico crucero por el Mediterráneo Occidental, el hecho de torcerse nuestro viaje planeado a Siria y Jordania en el mes de mayo y los buenos precios que ha presentado este año Holland America Line, junto a las enormes ganas que teníamos de probar esta compañía de los barcos de casco azul, hizo que reconsideráramos el veto que le habíamos hecho al Mare Nostrum. Además, en este caso Holland ha hecho un pequeño esfuerzo de imaginación incorporando a las típicas escalas mediterráneas, repetidas hasta la saciedad, alguna novedad algo más apetecible como Trápani o Santa Margarita de Liguria. Y el tiempo..espectacular, un sol radiante que nos ha acompañado durante todo el crucero y en todas y cada una de las escalas, y que nos permitió disfrutar a tope del Eurodam el día y medio de navegación que separa La Goulette de Barcelona.
En resumen, y a pesar de las reseñas negativas del párrafo anterior, el balance general de este crucero ha sido positivo, nos ha gustado la Holland, y aunque hay un pequeño punto de decepción, le hemos disfrutado y nos lo hemos pasado de fábula. Sin duda Holland America es una compañía a tener en cuenta para futuras navegaciones, y desde luego nosotros la tendremos. Ha habido cosas muy positivas, como la estupenda organización en el embarque-desembarque, tanto en Barcelona como en los tenders en las escalas, una tripulación atenta y servicial y unos precios de restaurantes alternativos y de bebidas bastante contenidos. A resaltar el "happy hour" en los diferentes bares, que por un dólar más te daban otra bebida idéntica. Una buena idea que no habíamos visto antes en otras líneas de crucero, y que ha servido para que hayamos alternado como nunca. En líneas generales el crucero nos ha resultado muy similar a Celebrity, con unas cosas mejores y otras peores, y desde luego con un sistema “as you wish” que no ha funcionado en nuestro crucero ¿En qué cabeza cabe que en un sistema de turno abierto se pueda reservar mesa para una hora concreta? Para eso es mejor dejar los dos turnos tradicionales de cena y no experimentar, porque el resultado es mesas vacías durante muchísimo tiempo, y la consecuencia largas colas en la puerta del restaurante. Y en una compañía tan premiada como Holland America cuesta digerirlo ¿no?
En unos días subiré un foto-tour del Eurodam.