Cuaderno de Bitácora de la Crisis: Gustav Rober Kirchoff y el Oro Solar

Por Carlos Carlos L, Marco Ortega @carlosmarco22
 
Gustav Robert Kirchhoff fue un físico prusiano famoso por su contribución científica en el campo de los circuitos eléctricos, la teoría de placas, la óptica, la espectroscopía y la emisión de cuerpo negro. A los que han estudiado ciencias al menos les sonará este señor, pues bien, resulta que hay una bonita anécdota que cuenta que Kirchhoff estudiando el sol y las líneas espectrales de Fraunhofer, estaba investigando la presencia de distintos elementos en el sol, y entre ellos el oro. En una de las ocasiones, su banquero le dijo con cierta sorna: – ¿De que sirve saber si hay oro en sol si no puedes traértelo? – poco tiempo después recibió un premio de Inglaterra por su investigación sobre las líneas espectrales en el sol y recibió una medalla de oro por el valor del premio, Kirchoff se apresuró a llamar al banquero y le dijo: "¿Quién dijo que no podría traerme el oro del sol?".
Esta situación no podría darse en España, primero por que esto no es Alemania (Kirchoff y Fraunhofer desarrollaron sus estudios allí) y tampoco es Inglaterra (y si no que se lo digan a nuestros jóvenes científicos que andan por medio mundo buscándose la vida). En España directamente le hubieran quitado su oro o lo habrían multado o lo habrían tachado de loco.
¿Que sí he perdido la cabeza? No, pero nuestros políticos sí, y por tanto la sociedad por permitírselo.
¿Pero a cuento de qué viene esto?
Centrándonos de nuevo en Kirchhoff y en el caso que nos trae, en España, resulta que este magnífico científico postuló también las dos leyes de la electricidad que llevan su nombre.
La primera ley dice: “Todas las corrientes entrantes y salientes en un nudo suman 0”. ¿Qué quiere decir esto? Pues que si en un nudo de una red eléctrica hay varias corrientes (o intensidades), las que salen tienen que ser iguales a las que entran. Por poner un ejemplo, y hablando en Vatios para que nos entendamos, imaginemos que en mi casa (digamos en el Interruptor de mi cuadro eléctrico, que al fin al cabo es un nudo) tengo un consumo instantáneo de 1.200 W, provenientes del consumo de mi frigorífico (pongamos 200 W) y de un microondas (1.000 W) que se encuentra en marcha, pues bien, por mi interruptor circulá la corriente correspondiente a 1.200 W, y en ese nudo sólo hay dos corrientes, una que entra y una que sale, para entendernos entra la corriente correspondiente a 1.200 W que proviene de la red eléctrica y sale otra igual que va a parar a mis electrodomésticos.
Supongamos que en ese mismo nodo (es decir en mi cuadro, en mi casa) conecto una pequeña instalación de paneles solares (pongamos que 4 paneles) que generan 1,000 W, resulta que, en el nodo, habrá dos corrientes que entran (la de la red y la de los paneles solares) y una sola que sale, cómo las que entran tienen que ser igual a las que salen y mis paneles están generando la equivalente a 1,000 W, resulta que sólo entrarán de la red 200 W.
La pregunta es, desde fuera del nodo (es decir desde fuera de mi casa), ¿qué diferencia hay entre sólo consumir 200 W o autoconsumir 1000 W y sólo importar de la red 200 W?
Para Kirchoff ninguna, para el Ministerio de Industria como mínimo pagar un “peaje de respaldo” o bien arriesgarse a una multa de hasta 30 Millones de Euros. Obviamente el peaje de respaldo y las condiciones técnicas que imponen al autoconsumo sólo tienen fines disuasorios para evitar que nadie pueda usar el sol, y por tanto pasen por caja del sistema eléctrico y por tanto del lobby que lo monopoliza. Con lo que desde el punto eléctrico no se sostiene ningún tipo de respaldo pues digamos que autoconsumir es exactamente lo mismo que consumir menos, a efectos eléctricos lo mismo que ahorrar energía instalando una bombilla de bajo consumo o apagar las luces innecesarias.
Claro, que estos listos, (empezando por el Ministerio y acabando por las eléctricas) que tanto se jactan de estudios, masters y demás vanidades además de Kirchoff imagino que también habrán estudiado al clásico Adam Smith y la libre competencia, pero claro, ellos dirán que la competencia es algo que es ajeno al sistema eléctrico pues es un “monopolio natural”, y se quedan tan panchos… pero al igual que las leyes de la teoría de circuitos eléctricos, las leyes de la oferta y la demanda se impondrán (a pesar de, como dice un buen amigo mío, de la intervencionista y bolivariana reforma energética) y acabarán quebrando el sistema eléctrico antes incluso de lo que se den cuenta. ¿Se acuerdan que, hasta hace poco, en España, la banca era la envidia de Europa?
Pues prepárense para la quiebra del sistema eléctrico, el ultra endeudado sistema eléctrico junto con la codicia de políticos y dirigentes del sector lo están llevando a una vorágine de más precio, menos consumo, menos ingresos, más costes, que cuando vayan a darse cuenta esto no hay quien lo levante, así que cuanto antes nos salgamos del sistema antes dejaremos de pagar, por que no se engañen, esto va ir a peor (desde tarifas casi planas y facturas sangrantes hasta apagones)… Pero a diferencia de los bancos o de las telecomunicaciones, ser independientes (energéticamente) es mucho más fácil, ¡unos paneles solares y unas baterías y que se queden con sus peajes de respaldo y su anacrónico sistema eléctrico!
Fuente: Blog Solarfighter.
C. Marco