Men´s spring/summer 2013 by Sarah Burton
Suspiro, permitidme suspirar antes de decir algo sobre Lee Alexander McQueen, el chico malo de la moda. Para los que no le conozcáis, desafortunadamente no podréis hacerlo, en 2010 decidió que tal vez este mundo no estaba hecho para él y ya no cabía más creatividad.
Alexander McQueen, diseñador formado en la prestigiosa escuela St. Martin College of Art & Design de Londres supo desde siempre que su vida iba a estar dedicada por entero al diseño. Su maestría y exquisita técnica, al servicio de la creatividad que le caracterizaba, pasó por grandes firmas tales como Givenchy hasta poder crear su maison, su firma, su vida: Alexander McQueen.
Women´s autumn/winter 2013 by Sarah Burton
Emprendedor y formado, estuvo respaldado por Isabella Blow, editora e icono de moda. Gracias a su apoyo, con la nueva firma pudo desarrollar ampliamente y sin miedos ni límites su don, el arte de crear para el que había nacido. Sus obras estaban impregnadas de un halo de misterio, de una inclinación gótica en cierto modo oscura, que dejaban ver el interior del propio Alexander McQueen. Las formas angulosas y agresivas, el mítico tartán escocés reinventado, la dureza impregnada de una sutil elegancia que enamoró a la mismísima Isabel II.
Pero para comprender lo que os estoy diciendo no vale con leer este artículo, hay que ver sus obras, sentirlas. Desde mi punto de vista Alexander McQueen es uno de los grandes diseñadores que ha dejado huella en el mundo de la moda.
Colección “Natural dis-tinction un-natural selection” by Alexander McQueen, Women´s spring/summer 2009
Actualmente el legado de la firma ha sido encargado a Sarah Burton, quien ha continuado la obra de McQueen y aportado su toque personal suavizando en cierto modo los modelos anteriores, más agresivos. Gracias a ella, la evolución de la firma ha continuado y se ha consolidado con gran éxito.
Por Jen Blanco
Ruta 42
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