"Manifiesto cuadernista
Vestidos de sol, como en un día de fiesta, salimos de nuevo a los campos y a los caminos, a las plazas y a las playas, a los ríos y al mar, corriendo más que el día y el viento. Atrás dejamos el frío cansado, la áspera sucesión del tiempo, la tiranía de la necesidad del triunfo, y nos entregamos transformados al juego y al júbilo en mañanas de luz y noches de calma, cuando cualquier cosa puede suceder porque todo brilla y todo quema..."
Hay cosas que sólo suceden en verano. Por ejemplo, aquí, en Invernalia, incluso pueden pasar cinco días seguidos sin llover. Y precisamente como es verano, la editorial Blackie Books saca su ya famoso Cuaderno de vacaciones para adultos.
Bien, los creadores del cuadernillo de este año, han cogido esa última frase y se la han puesto por montera, dejando bien claro que puede ser muy divertido embarcarse en uno de estos cuadernillos.
Esta vez no vengo con libros sesudos, adictivos, cultos o trepidantes. Esta vez traigo un cuaderno para hacer solo pero que se termina haciendo en compañía.. o al menos hablando de él. Una propuesta que llega cada año para divertir a los lectores habituales y a los ocasionales. Hoy vengo por el pasillo, cuaderno en mano, y os lo enseño diciendo: ·Venga, animaros... será divertido". Y esta vez es de verdad, porque yo también hice el mío.
Y vosotros, ¿recordáis los cuadernos de vacaciones que se hacen en la infancia?
Gracias
PD. Conste que la pregunta perfecta para la entrada de hoy era saber si habíais pasado de ser torturados con esos cuadernos infantiles, a torturadores. Pero...