Después de la dolorosa derrota de los Eagles en New Orleans, los reflectores de este equipo están dirigidos a un solo jugador: el quarterback suplente Nick Foles. Es uno de los fenómenos en este momento en la NFL y seguramente muchos aficionados al equipo tendrán fe en que lo puedan retener.
Pero las cosas no son del todo sencillas. Vamos poco a poco.
¿Cómo comenzó todo?
Tras ganar el Super Bowl LII, Foles renegoció su contrato con Philadelphia y acordó permanecer en el equipo por dos años y ganar 29 millones de dólares más incentivos, aunque el segundo año se podría cancelar por decisión de ambas partes.
Es un tema legal en el cual no nos vamos a meter, pero básicamente la franquicia debe tomar la decisión sobre si el segundo año del contrato continúa, con el aval del jugador.
¿Cuáles son las opciones de Foles?
El 12 de febrero (en menos de un mes) los Eagles deben tomar la decisión de ejercer o no el segundo año de contrato de Foles, que es justo cuando inicia la siguiente temporada NFL. Si ellos dicen dicen que sí, entonces sería turno de Nick “Fantastic” Foles de dar una respuesta en no más de cinco días.
Si el quarterback no desea ejercer el año de contrato faltante, entonces debe pagar dos millones de dólares para quedar en total libertad y ser agente libre en 2019. Ahora bien, acepta el año de contrato restante, Foles recibiría 20 millones de dólares totalmente garantizados al quinto día del inicio del año NFL, que sería el 17 de febrero de 2019.
Pros y contras
Si Philadelphia decide ejercer el año que le falta a Foles, estaría enviando el mensaje de que Foles es su quarterback titular y tendría que tener listo el plan para Carson Wentz. Nadie quiere tener en la banca a un quarterback de 20 millones de dólares.
El tema con Wentz no es complicado en este momento. Este entrará en su último año de contrato y aún hay tiempo para decidir si lo cortan, lo mantienen en el roster (al no ser tan caro en este momento) o si lo cambian y obtienen jugosas selecciones de Draft.
Todo recae en la fe que tengan Doug Pederson y la organización en Foles y Wentz. Ambos han mostrado ser buenos, aunque la durabilidad del joven quarterback puede ser la diferencia al decidir entre uno y otro. Foles tendrá 30 años de edad en la siguiente temporada y aún tiene mucha carrera por delante.
¿Qué esperar?
Conociendo los antecedentes de Howie Roseman, el vicepresidente ejecutivo de las operaciones de football en Philadelphia, el cual se ha caracterizado por tomar decisiones agresivas al tratarse de cambios de los jugadores, no me sorprendería verlo reteniendo a Nick Foles y enviando a Carson Wentz a otro equipo.
Estoy seguro de que los Eagles, con Foles y un ataque terrestre respetable, podrían haber avanzado de la Ronda Divisional, en donde se quedaron cerca de vencer al favorito para ganar el próximo Super Bowl LIII. Esa mejora a la ofensiva podría llegar con selecciones de Draft o algún jugador en intercambio por Wentz.
¿Tú qué crees que va a suceder con Nick Foles?