Pero eso mismo a veces también genera abismos en la convivencia. Estos aparatitos que son geniales por lo útiles están inclusive llegando a ser motivo de terapia entre padres e hijos (y no me cabe duda que entre parejas también). Por supuesto, esto no es culpa de los aparatitos. La responsabilidad de su uso es nuestra.
Hay una excelente publicidad que lo resume todo
No vaya a ser que nuestro hijo dé su primer paso y nosotros contestando un mensaje de texto, o dibuje su primer auto y estemos leyendo un mail...
Otro artículo que habla sobre el tema http://www.materna.com.ar/Home/Articulos-materna-Home/Un-nuevo-fenomeno-que-nace-los-huerfanos-por-las-Blackberrys/Articulo/ItemID/20441/View/Details.aspx