El miércoles participaba en el programa estrella de
Intereconomía, El Gato al Agua, el portavoz de Izquierda Republicana de
Cataluña (ERC) en el Congreso de los Diputados, Alfred Bosch.El político separatista desarrollaba en una
entrevista previa y luego en la mesa de debate, las razones que le llevan a
querer que Cataluña se separe del resto de España, haciendo un llamamiento a la
libertad de los pueblos para decidir su futuro, el típico mitin de los
independentistas, ya conocido por los que más o menos estamos interesados en la
política.Posteriormente se entró en un debate en el que se
analizaron los antecedentes históricos de Cataluña, su integración en el Reino
de Aragón y su posterior unión a Castilla para la definitiva creación de
España, en la que los territorios que conforman la actual Cataluña participaron
tanto o más que el resto. Pero el nacionalismo se ha montado su película, y la
vende muy bien, como ya analizamos en el artículo las mentiras del nacionalismo.Y ese es el problema que tiene España. El problema
no es lo que diga la historia, que ahí está. El problema es cómo se cuenta esa
historia. El problema es que el Estado ha entregado la Cataluña oficial a los
separatistas; ellos son los que deciden sobre la cultura, sobre la educación.Y el problema es que la semilla ya la plantaron hace
varias décadas, y esta semilla ha germinado en las escuelas catalanas. Como dicen
los colegios públicos catalanes al hablar de su identidad “somos una escuela
catalana y transmitimos la cultura catalana”, sin hacer ni una sola referencia
al resto del Estado, sin hablar de España, de la que forman parte. Y el
problema es que una Asociación de Padres de un colegio organiza un taller
independentista, como mostramos en la fotografía, y se ve como algo normal.Ese es el problema de España, que la propia España
ha renunciado a que se hable de España en parte de su territorio. El problema
es que miramos para otro lado, mientras los nacionalistas van rascando,
erosionando y haciendo ver que no existe relación entre Cataluña y el resto de
España.Por eso la historia importa poco cuando esta no se
transmite, cuando no se explica, cuando se mira para otro lado mientras los
nacionalistas explican las cosas a su antojo.El problema es que los distintos gobiernos de España
han hecho dejación de sus funciones, permitiendo que España sea obviada,
olvidada, maltratada, insultada…