"Tu mi salvación y mi perdición"
Hay rarezas, pequeñas piezas maestras como esta, que cuenta una dura realidad con creatividad, compasión y humor. La genialidad para ofrecer las condiciones de poder soportar el trago amargo, la dura realidad de los habitantes de la franja de Gaza, es esta película de Sylvain Estibal que merece pasar a la historia del séptimo arte, como un film geopolítico teñido, matizado de humor y humanidad.El discurso de la diferencia, del fundamentalismo religioso y de la xenofobia se resuelve a través de las vicisitudes de un cerdo y su pescador. Un palestino pobre que vive del rebusque y que logra sin duda un arquetipo de la inocencia y la buena energía. El actor Sasson Gabai conmueve hasta los huesos mientras inventa la manera de sacar provecho de la llegada del cielo, mejor dicho del mar, de este ejemplar porcino cuya presencia amenaza su integridad mientras paradójicamente le brinda bienestar.