Esta es una peli de culto que llegó a España a través del video, y eso porque su prota D. Johnson en ese momento era mundialmente famoso por una serie de tv. Yo no la he visto hasta ahora pero, como he dicho al ser de culto, he oído hablar della desde siempre. Además esta peli, basado en una novela breve de H. Ellison, tiene una adaptación al cómic, Vic & Blood, realizada por su autor y Corben que aquí se publicó hace muchos años, que no he leído hasta ahora, así que más difícil aún no saber della (decho conocí antes el cómic que la existencia de la peli). La comento aquí porque me ha sorprendido gratamente. Es un producto muy de la época. Seco y bruto. Hoy los cineastas (salvo los kamikazes) no tienen huevos para hacer algo así.El asunto es que me ha recordado mucho a El Verdugo de Berlanga (1ª peli española que citó en el blog?). Todavía se puede escuchar sobrella que es una peli anti pena de muerte. Eso hoy es una majadería. Tenía un pase cuando se estrenó ya que todo el mundo sabía que Berlanga era antifranquista. Pero ahora que eso no nos confunde, cualquiera con 2 dedos de frente (o más como yo) puede ver que es una peli tan misógina como su autor. El Verdugo no va contra la pena de muerte sino que usa esa medida punitiva extrema como prueba de que la sociedad que la alberga es una mierda. El auténtico villano de la peli no es Franco o la dictadura sino el sistema, que en lo básico no es distinto al que había en la 2ª república o en cualquier régimen anterior (tranquis que vamos a ver como tengo razón:). En la peli de Berlanga este es encarnado por una mujer, la del prota. Este es un pobre hombre joven feliz con su miserable vida porque es soltero y no tiene familia, cuyos problemas, lo que da pie a la peli, lógicamente, es que su novia (y su familia encarnada en el padre desta, por lo que es legítimo pasar al patriarcado de tal modo que aquel también representa al sistema ¿y al dictador?) amenaza ese estatus. El mensaje de Berlanga (un casado con hijos que según su propia familia pasaba dellos) es que la sociedad representada por el matrimonio tradicional cristiano (es decir, donde marido también significa padre y se es eso hasta la muerte) es algo que atenta a la libertad personal (del hombre) y por ello va contra la felicidad. Así pues da igual dictadura o república si todo se basa en el matrimonio tradicional (la 2ª república trajo el divorcio pero también el heteromatrimonio civil, y eso caló poco porque la sociedad era muy conservadora y duró poco tiempo). No hay que obcecarse con la pena de muerte porque en el año de la peli, 1963, SÓLO 2 estados europeos, Islandia y RFA, habían abolido la pena de muerte (España lo hizo en 1995; los transicioneros tardaron tanto por ver si podían aplicarla a algún facha?), así pues entonces ese castigo mortal caracterizaba cualquier estado del planeta (menos Venezuela, Costa Rica, Panamá, Ecuador, Uruguay, Colombia, República Dominicana y Honduras, más, lógicamente, los 2 países europeos antes mencionados). En fin, si en la peli de Berlanga el villano es la cazadora de marido (no olvidemos que estamos en una sociedad tradicional moderna por lo que está muy mal visto que la mujer trabaje y esta sólo puede vivir o en el hogar paterno o en el conyugal), en la peli de L. Q. Jones también es la mujer por las mismas razones: representa las ataduras a una sociedad tradicional conservadora. Por tanto, no es una mujer sino un símbolo.
Cuando ser misógino es ser antisistema: 2024: Apocalipsis Nuclear (L. Q. Jones 1975)
Publicado el 18 agosto 2018 por Lord_pengallanEsta es una peli de culto que llegó a España a través del video, y eso porque su prota D. Johnson en ese momento era mundialmente famoso por una serie de tv. Yo no la he visto hasta ahora pero, como he dicho al ser de culto, he oído hablar della desde siempre. Además esta peli, basado en una novela breve de H. Ellison, tiene una adaptación al cómic, Vic & Blood, realizada por su autor y Corben que aquí se publicó hace muchos años, que no he leído hasta ahora, así que más difícil aún no saber della (decho conocí antes el cómic que la existencia de la peli). La comento aquí porque me ha sorprendido gratamente. Es un producto muy de la época. Seco y bruto. Hoy los cineastas (salvo los kamikazes) no tienen huevos para hacer algo así.El asunto es que me ha recordado mucho a El Verdugo de Berlanga (1ª peli española que citó en el blog?). Todavía se puede escuchar sobrella que es una peli anti pena de muerte. Eso hoy es una majadería. Tenía un pase cuando se estrenó ya que todo el mundo sabía que Berlanga era antifranquista. Pero ahora que eso no nos confunde, cualquiera con 2 dedos de frente (o más como yo) puede ver que es una peli tan misógina como su autor. El Verdugo no va contra la pena de muerte sino que usa esa medida punitiva extrema como prueba de que la sociedad que la alberga es una mierda. El auténtico villano de la peli no es Franco o la dictadura sino el sistema, que en lo básico no es distinto al que había en la 2ª república o en cualquier régimen anterior (tranquis que vamos a ver como tengo razón:). En la peli de Berlanga este es encarnado por una mujer, la del prota. Este es un pobre hombre joven feliz con su miserable vida porque es soltero y no tiene familia, cuyos problemas, lo que da pie a la peli, lógicamente, es que su novia (y su familia encarnada en el padre desta, por lo que es legítimo pasar al patriarcado de tal modo que aquel también representa al sistema ¿y al dictador?) amenaza ese estatus. El mensaje de Berlanga (un casado con hijos que según su propia familia pasaba dellos) es que la sociedad representada por el matrimonio tradicional cristiano (es decir, donde marido también significa padre y se es eso hasta la muerte) es algo que atenta a la libertad personal (del hombre) y por ello va contra la felicidad. Así pues da igual dictadura o república si todo se basa en el matrimonio tradicional (la 2ª república trajo el divorcio pero también el heteromatrimonio civil, y eso caló poco porque la sociedad era muy conservadora y duró poco tiempo). No hay que obcecarse con la pena de muerte porque en el año de la peli, 1963, SÓLO 2 estados europeos, Islandia y RFA, habían abolido la pena de muerte (España lo hizo en 1995; los transicioneros tardaron tanto por ver si podían aplicarla a algún facha?), así pues entonces ese castigo mortal caracterizaba cualquier estado del planeta (menos Venezuela, Costa Rica, Panamá, Ecuador, Uruguay, Colombia, República Dominicana y Honduras, más, lógicamente, los 2 países europeos antes mencionados). En fin, si en la peli de Berlanga el villano es la cazadora de marido (no olvidemos que estamos en una sociedad tradicional moderna por lo que está muy mal visto que la mujer trabaje y esta sólo puede vivir o en el hogar paterno o en el conyugal), en la peli de L. Q. Jones también es la mujer por las mismas razones: representa las ataduras a una sociedad tradicional conservadora. Por tanto, no es una mujer sino un símbolo.