Hace varios años, Cristina, una buena amiga, me dijo que teníamos que ir juntas a Los Ángeles. Le había tocado hacer un viaje de pocos días y, como siempre se quedaba atascada en el tráfico, se topaba con la grabación de alguna película o serie. Ella, como sabe que me gusta mucho el cine, me llamaba cada dos por tres para contarme lo que veía y terminaba con lo mismo: "tenemos que venir". Creo que han pasado ocho o nueve años desde entonces y sigo sin conocer esa ciudad. Cristina y yo ahora vivimos en sitios distintos y de tanto en tanto, cuando nos vemos, planeamos muy por encima ese viaje que no terminamos de hacer. Ahora, que mi curiosidad ha crecido en todo este tiempo, veo más a Los Ángeles como esa ciudad a la que puedo ir dos o tres días para intentar ver lo básico que dicen las guías, pero sobre todo me deja la inquietud de alquilar un carro e ir por ahí sin orden ni prisa, abarcando lo más que pueda. Si Los Ángeles es una de las paradas casi que obligadas en la travesía de dar la vuelta al mundo, entonces sí, definitivamente, en algún momento quiero ir hasta allí. Mientras tanto, tomo nota de algunos de los sitios que me gustaría ver:
Avila Adobe. Para entender mejor una ciudad, está bien ir a su pasado y el Avila Adobe está marcado en el mapa como el edificio más viejo de Los Ángeles, construido en 1818 y que aún sigue decorado como en su buena época. La entrada es gratuita y a través de videos, muestran aspectos destacados de su construcción y cómo era el vecindario esos años.
Santa Mónica Pier. El lugar perfecto para ir a disfrutar del atardecer, tiene que ser el muelle de Santa Mónica. Allí hay un pequeño parque de diversiones, con una noria que se lleva la atención. Además, este es el lugar que marca el final de la famosa ruta 66. Así que es un imprescindible.
Venice Boardwalk. Este paseo llama por completo mi atención: vendedores ambulantes, tiendas, cafés, restaurantes, casas que parecen de otra época, músicos, artistas. Toda la buena vibra de Los Ángeles confluye aquí y en sus canales, a los que se les debe el nombre de Venecia por recordar a la ciudad italiana.
Cathedral of Our Lady of the Angels. Una amiga me ha enviado fotos de esta iglesia y me parece lindísima. Es amplia, de techos altos. Hacen visitas guiadas de lunes a viernes a la 1pm y es posible asistir a los recitales de órgano cada miércoles al mediodía. Lo mejor es que todo es gratis y nos acerca a la fe católica.
City Hall. Este edificio histórico fue construido en 1928 y hoy guarda una de las mejores vistas de la ciudad. Desde aquí se ve claramente el aviso de Hollywood y arranca buenas fotos para el recuerdo.
Little Tokio. Este sería, sin duda, uno de los sitios que llamaría mi atención: templos budistas, tiendas, jardines tradicionales, bares de sushi y noodles. Un lugar en el que me perdería, aunque la entrada sean 12$.
Griffith Observatory. Para ir porque sí. Un observatorio que data de 1935 y de entrada libre, en el que se pueden usar los telescopios si las noches están despejadas. Los shows en el planetario sí tienen un costo de 7$. Aquí se grabaron una de las escenas más bonitas de "La La Land".
Grammy Museum. Si les gusta la música tanto como a mí, entonces también van a considerar esta visita. Un paseo por la música americana, en un museo interactivo en el que es posible armar nuestras propias pistas al final del recorrido. Después de las 6pm de cada día, la tarifa se reduce a 8$ (normalmente son 13$)
Union Station. Es la última de las estaciones ferroviarias más grandes de América, construida en 1939. Conserva su glamour interior y ha sido locación de películas como Blade Runner.
Museo de Arte Contemporáneo. La entrada general son 12$, pero los jueves es gratis de 5pm a 8pm. Tienen colecciones permanentes desde 1940 y exhibiciones especiales. Creo que siempre hay que ver con detenimiento los museos de arte, aunque no seamos unos entendidos en la materia.
Walt Disney Concert Hall. Este es uno de los edificios más icónicos diseñados por el arquitecto Frank Gehry y es posible hacer visitas guiadas completamente gratis, de martes a sábado, de 10.30 am a 12.30 pm. También uno puede ir a ritmo propio, pero debe ser interesante conocer la historia detrás de esas paredes de acero inoxidable.
Sé que Los Ángeles tiene mucho más, pero si me toca ir por pocos días, al menos estos serían los lugares que no me querría perder. Si Cristina y yo logramos, por fin, coincidir en la travesía, estoy casi segura que podríamos alquilar un carro en Los Ángeles y llegar hasta Las Vegas, solo para extender un poco más la curiosidad viajera. Y entonces así podré ampliar esta lista de cosas por ver. Me gustan las ciudades grandes, aun y su caos. Ya veremos qué pasará cuando vaya.
La fotografía que abre este post es de Matt Weller/Unsplash