Esencia - Planeta / 26/03/2019 / 432 Páginas14.90 €
Dentro de la literatura romántica española tengo muy pocas autoras que considere imprescindibles, y son: Olivia Ardey, Àngeles Ibirika, Raquel Rodrein, Noelia Amarillo y por supuesto Mar Carrión. Apuestas seguras, como las llamo yo.
Pues bien, este mes salía a la venta la nueva novela de Mar Carrión y me encontraba como niña con juguetes nuevos. Lo empecé esta semana, pero por falta de tiempo no había podido adelantar, hasta anoche que devoré la novela en un par de horas.Antes de comenzar con la reseña tengo que decir que, tras su lectura, me di cuenta que ya conocía a uno de los personajes. Y es que en el año 2011 Mar publicó la novela Senderos que trata de Erin, hermana de la protagonista de esta nueva historia. Se puede leer de forma totalmente independiente. Cuando vuelva a encontrarte comienza con una Alice niña. Desde esa tierna edad ya sabe que la pintura es su pasión, pero tener a un padre como Wayne Mathews no ayudaba a estimularla en ese sentido, todo lo contrario. Él no consentiría que nadie de su familia, y mucho menos sus hijas, se dedicaran a ese tipo de profesiones. La vida de Alice ya estaba escrita, sería abogada, y por desgracia ella no tenía ni voz ni voto. En los siguientes capítulos nos reencontraremos con una Alice ya madura pero que sigue sin tener el control de su vida. Ha dejado de lado la pintura y se dedica en cuerpo y alma a la abogacía, aunque esto no la hace feliz. Entonces comienza a recordar su pasado y es ahí cuando conoceremos su verdadera historia. La mitad de la novela transcurre en el pasado. Desde que una Alice de veintitrés años llega a Brooklyn con la intención de, seguir las directrices marcadas por su padre, pero al mismo tiempo cumplir su sueño: estudiar arte. Es en esa etapa cuando Alice conocerá a Jack. Él es un cantante de rock con el pelo largo y que vive al día y disfruta de su vida, de su pasión. Cuenta con el apoyo de sus padres y amigos. Es la antítesis de Alice y ella en cierta manera lo envidia. La relación entre ambos comienza de una forma bastante brusca y tirante. Para Jack Alice no es más que una snob, una niña de papá que mira a los demás por encima del hombro. Para Alice el músico no lleva una vida ordenada, dentro de lo “establecido”. Con tiempo y debido a las circunstancias que la vida les pondrá en el camino en ese periodo de tiempo compartido, lograrán conocer lo que esconde el interior del otro y la atracción será cada vez más fuerte. La relación entre ambos me ha encantado. Sobre todo, porque comienza, como digo, con una antipatía muy grande y poco a poco se va transformando. Tengo que decir que el personaje de Jack es maravilloso, el perfecto personaje masculino para una novela romántica. Sin embargo, el de Alice no ha terminado de llegarme. Creo que, pese a todo lo que ha sufrido y pasado por culpa de su padre, es una mujer demasiado infantil. Tiene actitudes, sobre todo al comienzo de la convivencia, muy ilógicas. Menos mal que después parece madurar. La mayor parte de la historia transcurre en el pasado. Cuando veía que avanzaba y avanzaba y la autora no volvía al presente me sentí un poco desconcertada. La autora vuelve a la actualidad apenas cien páginas antes del final. Y esta es la única pega que tengo de la historia. Creo que el final es un poco acelerado para mí gusto. Después de disfrutar de una historia tan bonita, una relación que se ha forjado a fuego lento creo que el desenlace es demasiado precipitado. Cuando vuelva a encontrarte ha sido un perfecto reencuentro con la autora. Una novela sencilla pero absolutamente maravillosa. Con unos personajes, sobre todo el masculino, que te roban el corazón. Una historia emotiva y pasional que narra el primer amor, el verdadero. La entrega, los sacrificios y sobre todo el reencuentro, las segundas oportunidades para encontrar la felicidad. Si disfrutan de esas novelas que dejan una sonrisa en la boca y el corazón desbocado cuando cierran la última página sin duda no deben perderse Cuando vuelva a encontrarte.