Cuando hacemos ejercicio, no sólo perdemos agua, sino que también se pierden electrolitos como sodio, el potasio o el calcio. No hay que olvidar que el organismo consume energía continuamente y por lo tanto las células necesitan glucosa para producirla. Por tanto en condiciones de actividad física hay que reponer electrolitos y glucosa y por ello es recomendable el consumo de bebidas que los aporten como los zumos de frutas y verduras naturales. El té frío o el agua de frutas también es una buena manera de hidratarse.
En condiciones normales, con una alimentación equilibrada, especialmente rica en frutas y verduras, y el consumo de al menos 2 a 3 litros de agua al día es suficiente para asegurar una hidratación adecuada.