¿Cuánto vamos a vivir?

Publicado el 26 enero 2015 por Javier Ruiz Fernández @jaruiz_

El Banco Sabadell presentó, en 2013, uno de sus ciclos de conferencias a través de las voces de cuatro reputados científicos (Dr. Antonio Alcaraz, Dra. Elena Sancho, Dr. Alejandro Mira y Dr. Jesús Tresguerres) que englobaba tras de sí la siguiente pregunta retórica: ¿Cuánto vamos a vivir?

Mi generación, nacida a principios de los sesenta, probablemente estará viva en el año 2050.

Dr. Antonio Alcaraz

Obviamente, ninguno de los especialistas citados anteriormente tenía ni pajolera idea de si tú o yo vamos a vivir tres semanas o noventa años más, pero sí que parecían existir unas líneas bajo las que encuadrar el cómo y el qué. Vamos a vivir más, afirmaban todos ellos y, sobre todo, vamos a vivir mejor pero, en principio, nuestra fecha de caducidad se estirará, como mucho, hasta los ciento cincuenta años (150). Y no son palabras en el aire, sino que todo ello cuenta con cientos de miles de horas de investigación de equipos que están trabajando en múltiples campos. Aun así, no todos los investigadores están de acuerdo con estas apreciaciones, y algunos expertos afirman que podríamos llegar a vivir siglos enteros.

Mis conocimientos a nivel científico son escasos; no obstante, las líneas éticas que abren estos descubrimientos son numerosas. Para empezar, tenemos que considerar que vivir más años significa a) replantear con mayor prioridad todo el sistema económico y financiero, b) contar con una asistencia médica universal y democrática para los ciudadanos, c) llegado el caso, plantear la importancia de toda vida humana, la relevancia que tendría la edad biológica a este respecto y, sobre todo, la relación que se establecería con la edad cronológica, es decir, la necesidad de mantener un equilibrio entre nacimientos y muertes, así como la legitimidad de paralizar o hacer decrecer de forma artificial los nacimientos por un exceso poblacional.

Hoy día, algunos estudios han conseguido revertir parcialmente la vejez muscular y enfermedades relacionadas con la misma, como el cáncer, el alzhéimer o la diabetes de tipo 2. Del mismo modo, sobre el deterioro del cuerpo, el famoso gerontólogo Aubrey de Brey, entrevistado en nuestro país por revistas como Muy interesante o Vice, ha conseguido notables avances al respecto.

De este modo, vivir más será sinónimo de vivir mejor, puesto que la edad biológica (envejecimiento celular e incluso neuronal) podría, hipotéticamente, revertirse o paralizarse a través de la ciencia, permitiéndonos vivir cien años en un cuerpo joven que no envejeciese —expresado de una forma muy coloquial. En el mundo actual se suma una pregunta distinta a las destacadas en las entrevistas: ¿conseguiremos que así sea para todos o la eterna juventud quedará en manos de la minoría que mantiene el poder financiero?