Yo trato el escritorio de mi PC igual que el escritorio de mi mesa de trabajo: solo hay las herramientas que uso muy a menudo y algunos ficheros en los que estoy trabajando en este momento.
De hecho, actualmente solo tengo cuatro iconos en el escritorio: la carpeta de descargas, la carpeta con mis proyectos actuales, un enlace a la carpeta de archivos y el documento con este texto.
La gran mayoría de los escritorios que he visto están más llenos. En parte, los culpables son las aplicaciones que insisten en poner un icono en el escritorio y el propio sistema operativo que no ofrece otra manera más fácil de gestionar documentos.
No obstante, también los usuarios tienen parte de culpa por dejar todos estos iconos allí. En mi opinión, no es una manera eficaz de acceder a las aplicaciones y los ficheros, porque gran parte del tiempo el escritorio está escondido detrás de las ventanas de las aplicaciones abiertas.