► Título: Sonata de amor
► Autora: Blanca Álvarez
► Serie: Cuarteto de cuerda #1 (de 4)
► Publicación: Octubre 2009
► Editorial: Anaya
► Páginas: 168
► Precio: 10 €
Carmen, una chica de diecisiete años que toca el violín, necesita dinero para viajar con su novio a Normadía. Decide formar un cuarteto de cuerda con el que poder hacer bolos y así ganar dinero. Para ello, pone un anuncio en el conservatorio y enseguida recibe las llamadas de las que se convertirán en las integrantes del cuarteto: Carla, una chica bien aparentemente tímida; Celia, muy resuelta e independiente; y Cloe, una francesa que vive en Oviedo tras la separación de sus padres. Estas cuatro adolescentes compartirán alegrías y tristezas, deseos y decepciones, mientras descubren la increíble historia que envuelve a la “Sonata de amor”, en tres tiempos y un lamento de Glenn Glondelier.
En un Oviedo actual, la autora nos cuenta la historia de Carmen (violín), Carla (violín), Celia (viola) y Cloe (chelo), que forman un cuarteto de cuerda con el que ganarse un dinero extra dando pequeños conciertos. Conocemos las historias personales de las cuatro chicas (centrándonos más en Carmen, la protagonista de éste primer volumen de la tetralogía Cuarteto de cuerda), el nacimiento de su amistad, su esfuerzo para convertirse en profesionales y los sacrificios que eso conlleva.
El libro alterna capítulos entre el presente y el pasado para contar esas dos historias; he quedado prendada de ese misterioso músico y de su historia, y confieso que durante la lectura del libro no dejaba de imaginar cómo sonaría esa sonata en la vida real. Me ha encantado la forma en que la autora revivía el pasado y lo acercaba a la actualidad, haciendo crecer mi interés (y dándome ganas de morderme las uñas) cada vez más.
No es ningún secreto que servidora adora la música tanto como los libros, así que este librito me llamó la atención en seguida. Y aunque durante su lectura solté un par de bufidos, no llegué a congeniar del todo con la protagonista y las erratas estuvieron presentes, debo decir que al final el libro me dejó una buena sensación en el cuerpo.
Sonata de amor logra transmitir verdadera pasión por la música, por el amor al arte, a la vez que se convierte en una muestra de las virtudes del estudiante de música que quiere llegar a más; la autora sabe de lo que habla y sabe cómo contarlo. También hay, como se podría adivinar con el título, hueco para el amor, que se abarca de distintos modos, desde el amor por la familia hasta uno que va mucho más allá, rozando la locura. Si os gusta la música (clásica, mejor) y os apetece algo sencillito pero que tenga fuerza, desde luego vale la pena darle una oportunidad a esta pequeña joyita.
· Con la colaboración de Anaya ·