Si tenéis una casa pequeña con habitaciones de pocos metros cuadrados, y os apetece tener un cuarto de estar aunque sea de dimensiones reducidas, todo es posible con un poco de imaginación, y haciendo exactamente lo contrario a las fórmulas de decoración tradicionales para que se vean mayores.
Si ya tenemos un cuarto de estar y este es pequeñito, podemos convertirlo en un rincón bastante interesante de nuestro hogar pintando dos de sus paredes, por ejemplo, de un color oscuro. Es cierto que los tonos claros y pastel contribuyen a ampliar el espacio, pero en habitaciones pequeñas funcionan fenomenal! Lo único, os sugiero incluir colorido, bien en las telas, bien en cuadros que animen las paredes para contrastar ese color oscuro; e incluir una buena iluminación y superficies que la reflejen como un espejo, una mesa de cristal…
El mismo tipo de idea anterior lo podemos aplicar para sobrecargar la sala de estar, pero esta vez, en lugar de optar por muebles de gran tamaño, os sugiero poner un montón de elementos de diseño para crear un espacio más rico y estiloso. El hecho de que la habitación tenga pocos metros cuadrados no significa que no podamos tener elementos decorativos bonitos. La clave está en mantener la paleta de colores de la habitación en tonos suaves y lograr una sensación simétrica y equilibrada.
Por último, una gran incongruencia: añadir a tu cuarto de estar otra función más. Es decir, utiliza tu salita para colocar también una pequeña zona de despacho, o convertirlo en un dormitorio para invitados con un sofá cama, por ejemplo. En aquellas casas que son pequeñas hay que aprovechar el espacio al máximo y un cuarto de estar es la habitación más versátil de tu hogar para dotarle de una doble funcionalidad.
Imágenes vía Pinterest