Su color es violeta y transparente. Y puedes encontrarlo de diferentes formas, dependiendo el uso que quieras darle.
Por ejemplo, el péndulo de amatista lo utilizo en autosanaciones con Registros Akáshicos. La pirámide la he utilizado como cristal central en la mandala o parrilla de cuarzos (para sanaciones a distancia con Reiki) y los cantos rodados en tratamientos presenciales.
Personalmente es una de las que utilizo en mis propias sanaciones. Cuando necesito conectar con mi espiritualidad me suele acompañar en la meditación una punta de cuarzo.En momentos de angustia, el cuarzo amatista combinado con el rosa suele proporcionar tranquilidad y armonía. Pon una amatista en lugares donde necesites armonizar.
El sexto chakra utiliza la vibración de la amatista para conectar con la espiritualidad, con el yo interior. Trabajando de éste modo el sexto chakra podemos mirar hacia dentro, conectar con el todo, y llegar a la comprensión y la iluminación. La energía del cuarzo amatista ayuda y acompaña el proceso. Si estás en un momento de intranquilidad o desasosiego, el cuarzo amatista te puede acompañar.Limpialo cuando lo uses por primera vez o cuando se haya cargado de energías densas, esto depende del uso, eres tu mismo el que siente cuando está sucio y cuando no. No te "obsesiones" demasiado con estos temas, la sencillez en la apariencia de éste cuarzo o de cualquiera es una característica de su belleza. Si generamos inseguridad o inquietud la piedra también se cargará de éstas energías.
Es muy importante a la hora de trabajar con cuarzos, familiarizarse con ellos,fundirse con su energía.